Apnea del sueño, el peligro que acecha de noche puede impedirte conducir de día
Si crees que duermes las horas suficientes pero al día siguiente te sientes cansado. Si mientras conduces experimentas somnolencia e, incluso, descubres que tienes microsueños, consulta al médico; puede que sufras apnea del sueño, un trastorno respiratorio que resulta muy peligroso al volante.
La apnea tiene otros síntomas, como cefaleas matutinas, fuertes ronquidos, disminución de la libido, trastornos psiquiátricos, sequedad de boca, alteraciones de la voz, déficit de memoria, deterioro intelectual o irritabilidad.
La DGT trata la apnea como una de las enfermedades que, en función del grado, o impide conducir o exige una valoración continuada. Es por eso que si sufres esta enfermedad te exigirán presentar un informe de sueño: si recibes tratamiento y el trastorno está controlado, tendrás que renovar el permiso cada tres años; hasta entonces, no podrás conducir.
Qué es la apnea del sueño
Sin extendernos en explicaciones médicas, la apnea del sueño es un trastorno que provoca que la respiración se interrumpa o se vuelva muy superficial durante el sueño. Se manifiesta en forma de breves interrupciones, normalmente no duran más que pocos segundos aunque en casos graves pueden alcanzar minutos; pueden ocurrir más de 30 veces por hora.
Los expertos explican que existen varios tipos de apnea del sueño. La más frecuente es la que se denomina apnea obstructiva: causa un colapso en las vías respiratorias o una obstrucción de ellas durante el sueño. Los afectados permanecen segundos sin respirar y vuelven a hacerlo con un ronquido o resoplido.
También que los hombres son más propensos a sufrir apnea que las mujeres. La apena también es más frecuente en personas con sobrepeso y/o con antecedentes familiares.
Respecto al posible tratamiento de a apnea, los más empleados son dispositivos dentales y la presión positiva continua en las vías respiratorias. Esta última es una técnica conocida como CPAP que consiste en colocar, durante el sueño, una máscara especial sobre la boca y la nariz. Esta máscara mantiene abiertas las vías respiratorias mediante la adición de presión al aire que el paciente respira.
Por qué es peligroso conducir si estás diagnosticado de apnea del sueño
La principal consecuencia de que el sueño se interrumpa durante la noche es el exceso de somnolencia durante el día y este es, al igual que la fatiga, uno de los principales factores de siniestralidad para la DGT (presente en el 30% de los accidentes, según sus datos).
Las personas con apnea del sueño tienen mayor riesgo de sufrir un accidente de tráfico porque la obstrucción de la respiración provoca un descenso de los niveles de oxígeno en el organismo, que dificulta que la persona tenga un sueño reparador y se muestre con signos de cansancio a la mañana siguiente.
Datos de Tráfico señalan que un conductor que sufre apnea del sueño tiene hasta seis veces más probabilidades de sufrir un accidente; además, los siniestros en los que se ven involucrados suelen ser más graves.
Apnea y permiso de conducir
En 2016, España incorporó la Directiva Europea que regula las aptitudes psicofísicas para obtener o prorrogar el permiso de conducción. Una de ellas hace referencia a la apnea del sueño.
Los Centros de Reconocimiento de Conductores (CRC) tienen indicaciones para realizar una valoración individualizada. Las personas diagnosticadas con apnea obligatoriamente deben presentar un informe de la Unidad del Sueño que les trata, en el que se especifica si la enfermedad está controlada, en especial la somnolencia y el tipo, cumplimiento y eficacia del tratamiento .
En caso de que todo resulte positivo, se les renueva el permiso de conducción por un año si son conductores profesionales y por tres al resto.
El nivel de afectación de un conductor se calcula en los CRC a través de la llamada Escala de Epworth, un breve cuestionario en el que se pregunta sobre las situaciones cotidianas en las que una persona que queda dormida y con el cuestionario STOP-Bang. Este último, incluye una serie de datos objetivos, como hipertensión arterial, índice de masa corporal, edad o circunferencia de cuello.
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