15 cosas que hacen que le caigas mal a la gente

¿Te has preguntado alguna vez qué cosas hacen que le caigas bien o mal a la gente? 

Business Insider ha recopilado 15 cosas que hacen que caigas mal a la gente. Algunas las puedes cambiar (si quieres), otras se escapan a tu control...

Compartir demasiadas fotos en Facebook

Un estudio publicado hace unos años aseguraba que compartir demasiados datos/fotos en tu perfil de Facebook puede ser perjudicial para tu vida real.

"Esto se debe a que la gente, aparte de amigos muy próximos y familiares, no parece conectar muy bien con las personas que comparten fotos de sí mismos constantemente", según explicaba en un comunicado David Houghton, de la Birmingham Business School, y director del estudio.

Parece que a los amigos no les gusta que se publiquen demasiadas fotos de la familia, y a los familiares no les gusta que compartas demasiadas fotos de amigos.

Tener muchos o pocos amigos en Facebook

Parece que en lo que a Facebook se refiere se cumple aquello de que en el medio está la virtud, porque si tienes muchos amigos, malo; y si tienes pocos, malo también.

La pregunta es: ¿cuántos amigos hay que tener en Facebook para caer bien a los de la vida real? Parece que la cifra perfecta son 300 seguidores.

La razón es que si tienes más de 300 da la sensación de que tu vida está demasiado centrada en Facebook y que muchas de esas relaciones se traban no por afinidad, sino por desesperación.

Confesar algo excesivamente personal al inicio de una relación

Puede que pienses que abrirte a alguien a quien acabas de conocer reforzará vuestra relación, pero los estudios demuestran que no es así, sino todo lo contrario.

Parece que compartir algo demasiado personal demasiado pronto transmite inseguridad y reduce tu atractivo.

Tampoco se trata de ser demasiado misterioso. La cantidad justa de información es la que incluye detalles de tus aficiones y recuerdos bonitos de tu infancia. Lo demás, lo contarás más adelante. 

Querer saber mucho de la otra persona sin hablar de ti

Vale, a la gente no le gusta que reveles algo íntimo demasiado pronto; peeeeero, si ellos te desvelan un secreto esperan que tu correspondas con otra confidencia.

Los estudios afirman que si quieres que la relación fluya la comunicación debe ser bidireccional.

Utilizar una foto de perfil tomada demasiado cerca

Un estudio del California Institute of Technology plantea que las caras fotografiadas desde una distancia de solo 45 centímetros se consideran menos fiables, atractivas y útiles que las tomadas desde 135 centímetros.

Ocultar tus emociones

Parece que si quieres caer bien a la gente es mejor hacerles ver cómo te sientes que ocultar tus emociones. 

En un estudio de 2016, investigadores de la Universidad de Oregón grabaron en vídeo a personas que estaban visionando dos escenas de películas: una era la del orgasmo falso de la película Cuando Harry encontró a Sally, y una escena triste de El campeón. En algunos casos, se pidió a los actores que reaccionasen con naturalidad; en otra, que anulasen sus emociones.

Entonces, se presentaron cuatro versiones de los vídeos a estudiantes de grado superior. Los investigadores midieron cuánto interés mostraban los estudiantes en hacerse amigos de las personas que aparecían en los vídeos, así como su percepción de sus personalidades.

Los resultados mostraban que los que anulaban sus emociones gustaban menos (los consideraban menos extrovertidos y agradables) que los que actuaban con naturalidad.

Ser demasiado amable

Lo normal es pensar que cuando más abale y desprendido seas con la gente mejor les caerás. Pero resulta que no, al parecer si eres demasiado generoso la gente piensa que tienes intereses ocultos...

Pecar de falsa modestia

Un estudio pidió a estudiantes de grado superior que anotasen cómo responderían a la pregunta de cuál era su peor rasgo en una entrevista de trabajo. Los resultados mostraban que más de tres cuartas partes de los participantes caían en la falsa modestia: en general, apuntaban que eran perfeccionistas o que trabajaban en exceso.

No obstante, otros participantes independientes en el estudio declararon que preferían contratar a los participantes que habían sido sinceros, y que les gustaban más. Esos estudiantes respondieron cosas como: "No siempre soy todo lo organizado que debiera" y "A veces reacciono de forma excesiva a los problemas".

Ponerse demasiado nervioso

El problema de dejarte llevar por los nervios es que terminarás sudando en exceso y ese olor genera rechazo entre los demás.

Lo demuestra un estudio en el que varias mujeres tenían que oler el sudor producido por el ejercicio y por situaciones tensa y mostraban más rechazo a este último.

No sonreír

Para llegar a esta conclusión, un grupo de científicos mostró varias fotografías de una misma mujer en diferentes actitudes, la que generó más simpatía fue aquella en la que sonreía.

Incluir un emoticono sonriente en un correo electrónico

¡Y tu que te creías tan simpátic@ por meter una carita sonriente en tus mails!

Hay estudios que afirman que incluir emoticonos en los correos electrónicos no solo no transmite cercanía sino que te hace parecer menos competente.

Tener un apellido difícil de pronunciar

Te lo advertimos, no todas las cosas que hacen que caigas mal a la gente están bajo tu control.

Un estudio de 2012, firmado por investigadores de las universidades de Melbourne, Lovaina y Nueva York probó que a la gente con apellidos más complicados se la juzga de manera más negativa.

En un experimento que se incluía en el estudio, los participantes, estudiantes, leían un artículo de periódico falso sobre un hombre que se presentaba a las siguientes elecciones locales. Algunos participantes leían la historia de un hombre con un apellido relativamente sencillo de pronunciar (Lazaridis o Paradowska); otros, sobre un hombre con uno más complicado (Vougiouklakis y Leszczynska).

El resultado fue que los participantes que leyeron sobre el hombre del apellido sencilla decían que era una mejor opción para el puesto que los que leían sobre el del apellido complicado.

Presumir de conocidos

Puede que seas amigo de Rafa Nadal, pero no hace falta que se lo vayas contando a todo el mundo.

Es tu decisión, puedes hacerlo, pero que sepas que presumir de conocidos famosos hace que tengas una imagen menos agradable y competente.

Dar la mano sin fuerza

Un estudio de 2008 publicado en el Journal of Applied Psychology mostraba que, en entrevistas simuladas, los estudiantes que estrechaban la mano con firmeza al inicio de la entrevista eran valorados como más aptos para un puesto al término del proceso.

Comportarte como si alguien te cayese mal

Si no quieres caer mal, no te comportes como si los demás te generasen rechazo.

Esto es por un efecto que la psicología llama reciprocidad del afecto y que consiste en que cuando te hace sentir que le caes bien, termina por caerte bien. Por la misma razón, si no expresas simpatía por la persona a la que acabas de conocer, puedes generarle rechazo.