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Porsche Cayman S Yellow Racing, no apto para supersticiosos

Amarillo por fuera, amarillo (y negro) por dentro, los supersticiosos no me querrán pero un coche como este Porsche Cayman S preparado por Porsche Exclusive no puede dar más que buenas experiencias.

El Porsche Cayman S Yellow Racing es amarillo. Muy muy amarillo para ser exactos, pero lejos de querer acercar o alejar a los buenos o malos espíritus, la elección del color responde al deseo del equipo de Porsche Exclusive de dejar claro que es un deportivo con mayúsculas. 

Sus creadores explican que, para acentúar todavía más su espíritu deportivo, su Porsche Cayman S monta el paquete SportDesign, aunque no niegan que el color es su principal característica.

El Cayman S personalizado es, como decimos, muy amarillo. De hecho, por fuera, es todo amarillo salvo la parte baja de los espejos retrovisores y los logotipos de Porsche que luce en las puertas y que han pintado de negro. Tampoco lo son los faros que tras el trabajo de Porsche Exclusive lucen ahumados. 

También es amarillo y negro por dentro, aunque aquí la proporción de los tonos es a la inversa. El interior del Porsche Cayman S Yellow Racing es negro, salvo las molduras de PVC en color amarillo de la consola central, el marco de los relojes y las salidas de aire. Como novedad, luce el logo de la marca en los reposacabezas.

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