Prueba Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV: ¿el próximo superventas?

La prueba del Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV, que acaba de ser presentado a nivel global en Lisboa, es la mejor muestra de que la marca alemana no quiere quedarse fuera del jugoso pastel que son actualmente los SUV y que serán aún más en los próximos años (todas las previsiones apuntan a que la moda del todocamino continuará imparable en el futuro). Vale, Volkswagen ha llegado un poco tarde, pero está dispuesta a recuperar el terreno perdido a toda costa: Al T-Roc, modelo que se sitúa justo por debajo del Tiguan, le seguirá próximamente el T-Cross, un todocamino aún más pequeño.

Con una estética con un toque más hatchback y menos todocamino que algunos modelos como por ejemplo el Seat Ateca, el nuevo Volkswagen T-Roc apuesta por un diseño dinámico en el que destaca especialmente su ancho frontal, su techo de estilo coupé y sus luces LED de forma cuadrada (una seña distintiva que solo está disponible en el acabado alto de gama). Es innegable que a la vista resulta muy atractivo: de hecho, son varias las personas que durante la jornada de pruebas se quedaron mirando el coche e incluso me preguntaron qué modelo era. Primer objetivo conseguido: los alemanes han logrado parir un modelo resultón.

Acabados y opciones del Volkswagen T-Roc

El grupo automovilístico pretende facilitar al máximo las cosas a los compradores de su nuevo modelo. Para ello ha huido de complicadas listas de equipamientos: tres acabados, cuatro paquetes de equipamiento opcionales y 7 extras más. El primer acabado, denominado Advance, incluye asistente Front Assist con función de frenada de emergencia en ciudad, sistema de detección de peatones, freno anticolisiones múltiples, control de crucero adaptativo y aviso de cambio involuntario de carril. La versión Advance Style ofrece una mayor personalización gracias a la carrocería bicolor (el techo, los pilares y los retrovisores pueden ser blancos o negros). Cuenta además con iluminación ambiente y un paragolpes más deportivo. Común a los dos acabados son las llantas de 17 pulgadas, los retrovisores plegables eléctricamente y el App-Connect. Finalmente, el acabado top es el Sport, compuesto por carrocería bicolor (opcional y solo en color negro) luces LED, cuadro de instrumentos VW Digital Cockpit, sistema de infoentretenimiento con pantalla de cristal, diferentes modos de conducción, llantas oscurecidas de 17 pulgadas “Montero”, App-Connect, carga del smartphone por inducción y cámara de visión trasera.

Por cierto, si eres de esos que quieres tener el coche antes que nadie, debes saber que Volkswagen ofrece a través de su web una edición especial limitada de lanzamiento que destaca por su completo equipamiento y que se denomina Limited Edition. Son solo 150 unidades y es necesario realizar una prereserva de 500 euros -sin compromiso de compra- para tener derecho a adquirirlo una vez lo hayas visto en vivo.

Los paquetes disponibles varían en función del acabado del T-Roc. Los modelos Advance y Advance Style pueden incorporar los pack Confort (Light Assist, portón eléctrico del maletero y cámara trasera), Dynamic (tren de rodaje deportivo, diferentes modos de conducción y barras plateadas en el techo) y Sound (sistema de sonido Beats, receptor radio digital DAB+ y control por voz). Por su parte, el T-Roc Sport puede enriquecerse con los paquetes Sound y Travel (asientos delanteros térmicos, portón eléctrico del maletero y apoyos lumbares delanteros). El precio de estos paquetes de equipamiento es de 900 euros. A partir de 2018 también podrán elegirse paquetes R-Line interior y exterior.

Motores del Volkswagen T-Roc

En el momento de su lanzamiento (diciembre), el SUV alemán estará un poco limitado inicialmente en cuanto a la combinación de motores, cajas de cambios y transmisiones. Al principio, y según el acabado que elijas, solo habrá disponibles estas configuraciones: los motores gasolina 1.0 TSI de 115 CV con cambio manual (un bloque que ya equipan modelos como el Ibiza y que destaca por sus buenas prestaciones); y 2.0 TSI de 190 CV (solo disponible de momento en la versión Limited Edition) con cambio DSG de 7 velocidades y tracción total 4Motion; y diésel 2.0 TDI de 150 CV con cambio DSG y 4Motion. Un poco más adelante llegarán el resto de opciones: los bloques de gasolina 1.5 EVO TSI de 150 CV (que según la marca será el acaparará el mayor número de ventas) con cambio manual o DSG de 7 velocidades; el 1.6 TDI de 115 CV con cambio manual y el diésel 2.0 TDI de 150 CV con cambio manual o DSG de 7 velocidades. Los precios del Volkswagen T-Roc partirán de los 23.500 euros (incluido descuento promocional) de la versión 1.0 TSI de 115 CV con tracción delantera.

Prueba del Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG 4Motion

En la presentación internacional que ha tenido lugar en los alrededores de Lisboa y Cascais (Portugal) he tenido la oportunidad de probar el Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV DSG 4Motion (otras versiones gasolina que considero interesantes como la 1.0 TSI de 115 CV y 1.5 EVO TSI no estaban disponibles entre la flota de pruebas). Debido a que se trataba de una unidad preserie -muy cercana ya al modelo de producción, eso sí-, su equipamiento no se correspondía con ninguno de los que habrá a la venta. Su precio es de 34.615 euros.

Tal y como te comentábamos en la primera prueba del Volkswagen T-Roc, el nuevo SUV germano utiliza la archiconocida plataforma MQB y comparte base tecnológica con el Audi Q2, un modelo que será uno de sus principales competidores. Tiene una longitud de 4.234 mm (252 menos que el Tiguan) y una distancia entre ejes de 2.590 mm.

Al ser un coche estéticamente atractivo y con un cierto aire coupé, seguramente captará la atención de muchos compradores que inicialmente se planteen la compra de un compacto y acaben eligiendo un vehículo de estas características: debido sobre todo a su apariencia, al sello 'made in Volkswagen' y a su mayor altura al suelo (161 mm), algo que facilita el acceso y una mayor visibilidad. Y puestos a elegir uno, te recomiendo que elijas el bicolor, ya que algunas combinaciones cromáticas son realmente bonitas. Sí, estoy seguro que este T-Roc acabará robando unos cuantos compradores al todopoderoso Golf, entre otros. Rivales más directos, aparte del citado Q2, serán el Mini Countryman, el Opel Mokka X, el Toyota C-HR o el Fiat 500X, entre otros. Incluso sus parientes, algo más grandes eso sí, Seat Ateca y Skoda Karoq.

El resultado no es tan satisfactorio en el interior. La combinación de colores en los apliques es vistosa, pero sin embargo hay demasiado plástico a tu alrededor. Sí, de calidad y bien ajustados, pero que transmiten una sensación algo pobre para un modelo Volkswagen que tampoco es el más barato del mercado. En este aspecto creo que la marca podría haberse esforzado un poco más para transmitir una atmósfera de mayor calidad. Sinceramente, como cliente es lo que esperaría. Sí está a la altura el espectacular cuadro de instrumentos digital Cockpit de 11,7 pulgadas, que incluso te muestra a pantalla completa el mapa de navegación (es una pena que solo esté incluido de serie en las versiones Sport). El sistema de infotainment Composition Colour con pantalla táctil de 6,5 pulgadas se ofrece de serie para todas las versiones. El siguiente nivel es el sistema Composition Media de 8,0 pulgadas acristalado, que incluye un reproductor de CD. El sistema superior de 8,0 pulgadas acristalado con módulo de navegación es el Discover Media.

Dentro del habítaculo y pese a las dimensiones contenidas, no tienes sensaciones de estrechez: ni en las plazas delanteras, ni en las traseras. Al volante, la postura de conducción es buena y, pese a su reducida luneta trasera, la visibilidad no se resiente. Los cuadros de instrumentos se leen perfectamente y el sistema de infotainment es intuitivo (cómo debe ser). Sí echo en falta algo más de versatilidad en forma de algún hueco portaobjetos más, una redecilla, etc. Sobre todo en un vehículo que, según el propio fabricante, está muy enfocado al público joven y activo.

En la banqueta posterior, hay espacio suficiente tanto para las piernas como para la cabeza, siempre que viajen dos personas: meter tres no me parece precisamente la mejor idea... El maletero, por su parte, ofrece unos más que generosos 445 litros -en dos alturas-, que se reducen a 392 litros en el caso de las versiones 4Motion.

Hasta ahora te he contado que el T-Roc de esta prueba transmite una sensación de dinamismo, ¿pero lo plasmará sobre el asfalto? Tras probar el Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 150 CV durante un día entero y por diferentes carreteras puedo decirte que sí: para ser un SUV, el coche se mueve con soltura. Su centro de gravedad, más bajo que el algunos todocaminos, sus dimensiones y pesos contenidos hacen que el coche no se sienta pesadote o mole entre tus manos. Incluso a ritmos alegres, la carrocería no se resiente en exceso, ni se muestra excesivamente bailona. El coche toma las curvas de forma noble y sin hacerte cosas raras, y la dirección te informa bastante bien todo lo que está ocurriendo. Vamos, que para ser un coche alto, mantiene bien el tipo y transmite confianza al volante.

El motor diésel, con sus 150 CV y un par de 340 Nm, acelera de 0 a 100 en 8,4 segundos y alcanza los 200 km/h (su consumo oficial es de 5,1 litros). Tiene potencia más que suficiente para mover al pequeño SUV sin problemas... aunque haciendo más ruido del que me gustaría. Un sonido que no será el único que oirás a bordo, ya que en rodadura también se agradecería que fuera algo más silencioso (por ejemplo, en ocasiones los retrovisores emiten un pequeño pero molesto silvidito). El cambio DSG de 7 velocidades funciona correctamente en condiciones normales de uso, pero si quieres exprimir un poco la cosa, aparece el problema de siempre: la tendencia de los cambios automáticos a engranar la marcha más larga posible hace que muchas veces el coche se quede sin fuerza. Y, eso cuando estás subiendo una carretera alegre, no mola. ¿La solución? Montar levas en el volante (opcionales en España pero necesarias -cuestan 250 euros-) y activar el modo manual para que seas tú el que decidas la marcha que quieres llevar engranada en cada momento.

Volkswagen espera que el T-Roc se convierta en un vehículo clave en su segmento. Y es probable que lo consiga. Se trata de un crossover de tamaño práctico, con aspecto molón y unas cualidades dinámicas bastante buenas para un SUV. Sin duda, un serio candidato para robar parte de protagonismo a un Golf que sigue siendo bastante más coche: por calidad percibida, acabados y confort de rodadura. Es una pena que el interior del pequeño todocamino no logre convencer tanto como su exterior. Pese a ello, estoy seguro de que se convertirá pronto en un superventas.