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Prueba: Volkswagen T6 California. Ruta por el origen de su nombre

Ruta con la Volkswagen T6 California
¡No te olvides la tabla!

Las temperaturas han bajado mucho. Ni una sola nube en el cielo. Las estrella titilan. Solo se oye un ligero rumor. No, no es el ronquido de un oso en su hibernación. Es la nueva furgoneta viajera de Volkswagen. Y nosotros hemos realizado con ella esta ruta, que ahora te contamos. Prueba: Volkswagen T6 California (2018).

Prueba en vídeo de la VW California

La furgoneta, con el techo elevado en 20 grados, calienta su agrandado habitáculo gracias a su calefacción en parado. Llegamos a los 20 grados. Estamos en el Estado del que toma su nombre: California. Más concretamente, en el rancho Songdog del parque nacional National Forest, a pocas horas al norte de Los Ángeles.

Esta noche rodeado de coyotes es un escenario inmejorable. Hago la cama rápidamente, apago las luces y me duermo contemplando las estrellas a través de las ventanillas de la Volkswagen T6 California

¡A la playa!

Al día siguiente, conduzco hasta los aparcamiento de las playas de Malibú y Venice Beach. Recorro la costa del Pacífico durante dos horas. La sensación tosca de estar llevando una suerte de camión pequeño ya es cosa del pasado. Al volante, se siente más como un turismo. Grande, con sus inercias, pero un turismo al fin y al cabo. La T6 es la Bulli más refinada de todos los tiempos. Es más confortable y silenciosa que nunca, filtra muy bien los baches y tiene aplomo en curvas.

Volkswagen Transporter T6

Me cruzo con muchos surferos al volante de una Bulli, muchas de ellas clásicas. Termino en una concentración de estas joyas. "Tuve una cuando aún estaba en el ejército", me desvela un señor mayor. "En una de estas perdí mi inocencia de joven", de confiesa una señora con la tez levemente enrojecida. Otro visitante recuerda cuando estuvo en el Caravan Salon de 1988, en la que el California cobró especial protagonismo, ya que celebraba sus 157.500 unidades vendidas. "Allí vi al mismísimo Ronald Regan, ya presidente", me cuenta.  

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En solo tres años, la T3 fue todo un éxito, done vendió más de 20.000 ejemplares. En 1990 llegó el cambio a la T4, que no solo variaba el diseño, también la mecánica.  El motor pasó de detrás a la parte delantera, igual que el eje propulsado. Hasta el año 2003 se vendieron casi 40.000 ejemplares de la T4 California.

De su sucesora la T5, se vendieron unas 55.000 hasta 2015. Y le sigue al actual modelo, la T6, que el pasado año logró el récord anual del modelo, con 15.155 nuevas matriculaciones. Y lo cierto es que Volkswagen se lo ha trabajado para mantener el encantador espíritu clásico de este modelo. Por primera vez en décadas, puedes pedirlo con carrocería en dos colores, un homenaje a la T1.

Volkswagen T6 California

La tela enrollable que sirve de porche improvisado y las puertas deslizantes se han mejorado: se despliegan y desplazan con mayor fluidez. La cocina tiene ahora más huecos, y tres fuegos de vitrocerámica sobre la nevera y el horno. Una cosa que muchos no se explican es que mantenga la palanca del freno de mano mecánica entre los dos asientos delanteros. "Si fuera eléctrica, en su lugar se podría poner otra nevera", es un comentario habitual en los foros. O la crítica de que no esté disponible con la llave más moderna de Volkswagen. O de su precio excesivo. Pero no: estas carencias no son suficientes para detener a este mito imparable.

Y ya que has llegado hasta aquí... ¿Cuál sería tu coche ideal?

Valoración

Nota8

En esta prueba de la Volkswagen T6 California realizamos una ruta por el origen de su nombre. La "bulli" mantiene su espíritu clásico, pero puesta al día.

Lo mejor

Comportamiento, acabados, modularidad, el encanto de un mito.

Lo peor

Su precio es demasiado elevado, no casa con el espíritu "surfero" con el que nació.

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