Desde que la vimos por primera vez (año 2010), esta moto no ha parado de cosechar éxitos. Y no es que inventara la rueda (mucho menos, la rueda 'alta'), pero sí que entró de forma muy valiente en un segmento, el de rueda alta o de 16", que en realidad era patrimonio exclusivo de la Honda SH 'Scoopy'. Ahora, tras reinar en el mercado español, te ofrecemos aquí la prueba del nuevo Kymco Agility City 125 2020, el superventas del carné B que acaba de aterrizar con un precio de lo más competitivo.
Y con todas estas credenciales, entenderás por qué esta gran montura en formato tan pequeño era una de las motocicletas que más ganas teníamos de probar en la redacción de AUTO BILD y que ha resuelto y muy bien la papeleta del motero más exigente... que quisiera hacer mil recados en una mañana por la ciudad.
Porque, si eres de los que te gustan las motos-motos potentes, con marchas, un sonido potente y mucha respuesta, tienes que cambiar el chip antes de seguir leyendo: si no, no te harás una idea realista de lo que supone esta montura, que como todas las 125 refrigeradas por aire y más utilitarias, brillan en distancias cortas y en zonas concurridas.
Renovación al gusto patrio
Dicho esto, a simple vista, por fuera no difiere demasiado del Kymco Agility City 125 anterior. Pero si te fijas bien, su aspecto es más refinado, empezando por su color bitono, siguiendo por sus logotipos, pasando por su sencillo pero eficaz cuadro...
Y bueno, en aras de ese look más 'cool' (y de un abaratamiento de costes muy de agradecer), ya no viene de serie con el cobre portaobjetos trasero tipo 'top-case', que es cierto que era práctico pero que le daba un aspecto más propio de repartidores a domicilio -dicho sea esto con todo el respeto del mundo- que de urbanita elegante.
Esto es importante, ya que Kymco ha querido dotar a esta moto de esta 'cara' para conquistar (también) a ese otro tipo de público pero que, además, quiere una relación calidad-precio. El precio del nuevo Kymco Agility City 125 2020 es de 2.099 euros.
Y si tienes en cuenta que con la llegada de la Euro 4 todas las motos subieron de media un mínimo de 300 euros, pues el esfuerzo del fabricante por recortar así el gasto inicial es de agradecer. Además, el PVP incluye un año de seguro obligatorio que se puede convertir en un ‘Todo Riesgo’ por 135 euros y tiene, además, la opción de extender dos años más la garantía de la marca (dos años de serie) por 75 euros, según informa el fabricante taiwanés.
Y este tipo de decisiones estéticas y logísticas no es fruto de la casualidad, sino de las demandas de los consumidores españoles, porque el nuevo Agility City está concebido por y para nuestro mercado, con un resultado exclusivo en detalles y equipamiento, como el descrito anteriormente, la gama de colores (tres nuevos -el marrón que ves aquí y los nuevos tonos de blanco y negro-), el mullido del asiento con doble textura, las llantas con labios pulidos y el tubo de escape con protector de color grafito.
Llave, llave y contacto
A continuación, con la mentalidad de economía en adquisición, consumo y mantenimiento, es hora de cargar un casco abierto tipo jet y alguna otra cosa en el cofre de debajo del asiento, recordar que esto tiene su propia cerradura -un poco engorroso-, al igual que la miniguanterita del escudo, volver a meter y girar la llave en el bombín principal y arrancar el motor.
Este motor monocilíndrico refrigerado por aire y sólo 9 CV, desprende un sonido agradable por su poca rumorosidad (recuerda de nuevo que buscamos economía y confort) y es agradable al oído y al tacto, porque tampoco provoca apenas vibraciones.
La aceleración y la velocidad punta no son, precisamente, sus puntos fuertes, pero estira bien a su ritmo y la ligereza del conjunto (mira la ficha técnica bajo estas líneas) hacen que la progresión sea constante. Eso sí, para salir del tráfico urbano e incluso sin salir de ciudad, si vas por zonas con muchos repechos o por circunvalaciones rápidas de 90 por hora de máxima, la moto se te quedará un poco corta y la rueda alta y estrecha no será la mejor configuración para tus necesidades.
A cambio, verás que al coger su velocidad punta (unos 95-100 km/h en llano) el tren delantero no resulta demasiado rebotón (hecho demasiado común en este tipo de scooters básicos de 125 cc) y el eje trasero se antoja firme, pero nunca demasiado incómodo, si sabes reducir un poco la marcha ante badenes y resaltos. A esta operación ayuda mucho un sistema de frenada combinada de disco delante y detrás (una pena que el ABS no esté disponible ni como opción para abaratar costes) que es cómodo hasta para el más inexperto -a pesar de que las manetas no sean regulables- y con una efectividad notable, sin ser brusco.
Manejabilidad
Ya en ciudad, es un gusto colarse por todos los rincones, con unos retrovisores muy bien colocados (la visibilidad es realmente buena). La rueda alta no es tan 'juguetona' como la rueda pequeña en quiebros muy acusados, pero permite muchos más errores y se muestra bastante más controlable en situaciones de firme deslizante a baja velocidad. Eso si: si eres alto como yo, no podrás girar mucho el manillar sin darte con él en las piernas, así que es recomendable estar siempre preparado para sacar la rodilla pertinente.
El pasajero se puede acoplar cómodamente detrás de ti gracias a un asiento que, además de bonito, tiene un correcto diseño y gracias también a unos estribos plegables bien situados. Y con 'paquete', de nuevo, también la suspensión se luce, pues el eje delantero no llega a flotar en las maniobras más acusadas.
Conducción diaria (¡y nocturna!)
Por último, cabe destacar que esta no es una motocicleta para escapadas de fin de semana, sino que está concebida para usar a diario tanto en invierno como en verano, de día o de noche. Así, hemos tenido la ocasión de probar la nueva Kymco Agility City 2020 con buen tiempo, con lluvia, a pleno sol y de noche, a bajas temperaturas.
En todo caso, la rueda estrecha se ha comportado muy buen y ha salvado más de una situación crítica en mojado; además, el carenado protege mejor de lo previsto, si bien es cierto que a tan bajas velocidades es más fácil no luchar tanto con un viento gélido. Y en la instrumentación sí se echa de menos un medidor de temperatura -no tanto el cuentarrevoluciones- y una botonería que no sea tan difícil de pulsar.
Por contra, la iluminación delantera y trasera es muy buena con las bombillas halógenas 'de toda la vida', a pesar de no contar con LED más que en las luces de posición. De nuevo, los costes de adquisición y mantenimiento mandan. Y eso no tiene por qué ser malo. ¡Ni mucho menos!
Datos técnicos de Kymco Agility City 125 2020
- 1 cilindro, 4T, inyección (SOHC), 2 válvulas, refrigerado por aire.
- 95 km/h
- 125 cc
- 9 Nm a 6.750 rpm
- 9 CV a 8.500 RPM
- Horquilla telescópica hidráulica (delante) y doble amortiguador hidráulico con precarga en tres posiciones (detrás)
- Disco 260 mm/Disco 240 mm (frenada combinada CBS)
- 2.050/735/1.210 mm
- 131 kg
- 820 mm
- 100/80-16" y 120/80-14"
- 7 litros (más 0,5 litros de reserva)
- Euro 4.
- A1 y B
- 2.099 euros
- 2 años
- Gasolina
Conclusión
Lo mejor
Calidad-precio, acabados, sencillez mecánica, comodidad, iluminación.
Lo peor
Aceleración, velocidad punta, ausencia de ABS, ya no viene con top-case.