Probamos el primer coche sin espejos, el BMW i8 Mirrorless
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Tengo que reconocerlo: probar el BMW i8 Mirrorless por el centro de Las Vegas requiere un voto de confianza en la tecnología de Munich. Valor y al toro: aprovechando la presentación del BMW i8 Mirrorless en el CES 2016 he podido probar un vehículo que puede marcar un punto de inflexión de cara al futuro. Aquí tienes la prueba del primer coche sin espejos.
Vamos allá: pongo el intermitente para salir al carril izquierdo, e instintivamente dirijo la vista al espejo retrovisor exterior. Error, allí solo hay una pequeña cámara. Ok, tengo que girar la cabeza de nuevo al interior, y dirigir mi mirada a la pantalla de 300 milímetros de ancho por 75 de largo. Allí aparece un camión que viene por detrás y me cede el paso. ¿Me arriesgo? No puedo evitar girar la cabeza hacia atrás. Parece que me deja hueco. Allá voy.
Cambio de paradigma
Sí, los primeros minutos requieren confiar mucho, porque esto es un cambio de paradigma radical. Sin un espejo lateral, moverse entre el tráfico da miedo: uno se siente desnudo. En su lugar, hay dos pequeñas cámaras, y estas son sus ventajas: reducen el ruido aerodinámico y la resistencia al aire, lo que también significa que se reduce el consumo.
Pero hay un factor más importante: aumenta la seguridad. El ángulo muerto, con estas cámaras, es cosa del pasado. Cambiar de carril, con esta nueva tecnología, se realiza con mayores garantías. Esto es especialmente útil en autovías alemanas, por ejemplo, por cuyo carril izquierdo es habitual que te pasen coches a 200 ó 250 km/h.
Con todo, hace falta un tiempo para adaptarse a este sistema. Esta tecnología podría estar pronto en algunos modelos de serie de BMW. Por el momento, en Alemania y otros países de Europa ya está homologado. En Estados Unidos, debería estar permitido a partir de 2017, y le seguirán otros mercados estratégicos como China.
Conclusión
En definitiva, este sistema requiere un periodo de adaptación por parte del conductor, que instintivamente no puede evitar girar la cabeza a los espejos exteriores (que ya no existen). Pero una vez que se ha acostumbrado, lo cierto es que la visión panorámica de la pantalla interior y la desaparición definitiva de los puntos ciegos es una claro avance en seguridad.
Valoración
Hemos aprovechado el CES de Las Vegas para probar el BMW i8 Mirrorless, el primer coche sin espejos retrovisores. El prototipo alemán sustituye los retrovisores por
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