Prueba del Porsche 911 GT3 RS: más sofisticado y cercano a la competición que nunca

Típicamente inglés: lunes, 9 de la mañana, en Silverstone. Está lloviendo a cántaros, el cielo es gris plomizo sobre la pista del Gran Premio. Tenemos cita con el nuevo Porsche 911 GT3 RS. Justo aquí, porque el circuito británico de F1 es el mejor lugar para sentir la carga aerodinámica, la carga aerodinámica… y la carga aerodinámica. Porque de eso va este Porsche descomunal. 

Un GT3 RS para circuito

Sé que lo hemos escrito muchas veces antes: “coches de carreras homologados” para carretera. ¡Pero el dicho nunca ha sido más apropiado que para este nuevo RS! En los boxes se respira una mezcla inquieta de suspenso y tensión. 

Cuatro coches esperan en el pit lane, el jefe de desarrollo de GT de Porsche, Andy Preuninger, está hablando con uno de sus pilotos récordman en Nordschleife, Jörg Bergmeister. ¿Conducir o no en día tan lluvioso? Por suerte, la respuesta es afirmativa, aprovechando que las nubes nos dan una tregua. Y por suerte, las fotos ya se hicieron el día anterior

Diseño: el GT3 RS se ha vuelto más fuerte y más pesado

Se hace otro intento con una barredora para suprimir los grandes charcos, lo que me da tiempo para una breve sesión informativa técnica. En primer lugar, este 911 es tan complejo en términos de opciones de ajuste que las explicaciones requerirían diez páginas, así que vayamos a lo esencial: 525 CV, 1.450 kilogramos, en comparación con el predecesor (520 CV/1430 kg) es por tanto un poco más potente, pero también más pesado.

La nueva generación del 911 es más grande, más ancha, más masiva. La única forma de hacer que el automóvil fuera más rápido era a través de la aerodinámica, el chasis y la tecnología. Pero no estamos hablando de sprint o punta aquí, se trata de tiempos de vuelta.

De pronto, Bergmeister dice: "La pista está casi seca en algunas curvas, lo intentaremos en diez minutos". Volvamos a la aerodinámica. Debe dirigir la corriente de aire de la manera más inteligente y eficiente posible sobre y alrededor del coche. Y también utilizar el aire como elemento de presión. Porsche prácticamente ha hecho todo lo posible en lo que a spoilers y tomas de aire se refiere.

Un alerón imponente para el máximo rendimiento.

El monstruoso alerón trasero es el más notable. Es el primer colín en la historia del 911 más alto que el techo. No solo está hecho de carbono, la tabla superior del ala se puede ajustar 34 grados con un botón (DRS: Drag Reduction System).

Lleva aerodinámica activa con alas activas en la parte delantera (a partir de 100 km/h, con el 95 por ciento del pedal del acelerador), función de freno de aire incluida. Disculpa, ¿eso suena como Fórmula 1? Así es, utilizan el mismo sistema.

¿Y cuál es el punto? A una velocidad de 200 km/h, el 911 presiona 400 kilogramos sobre el asfalto, y a 285 km/h son unos increíbles 860 kilogramos. Incluso se pegaron dos aletas al techo para que el aire caliente del enfriador no afectara a la potencia del motor.

Comportamiento

Las nubes oscuras se acercan nuevamente desde lejos, así que me subo rápidamente en el automóvil, me abrocho el cinturón, giro el controlador  del volante a modo "Track" y listo. 

Desafortunadamente, hoy no hay tiempo para más juegos de ajuste (dureza del amortiguador, efecto de bloqueo del diferencial, control de tracción). Queremos sentir la carga aerodinámica, cómo el coche se aferra al asfalto por el simple aire.

Las primeras curvas me provocan ya una gran sonrisa. Gira con una precisión abrumadora, el agarre y la aceleración lateral son brutales. El bóxer de alta cuna suena rabioso, a 9.000 vueltas siento que me va a reventar los tímpanos. Y me encanta. 

La transmisión de doble embrague mueve las marchas con mucho entusiasmo, a pesar de los puntos húmedos en el asfalto, el chasis brilla con un agarre mágico, girar y frenar es lo más parecido a una montaña rusa. ¿Carga aerodinámica? Sí, realmente notable: los músculos de mi cuello todavía me duelen hoy.

Factores para decidir la compra

Esta decisión no se toma con la cabeza. En momentos como estos, a muchas personas les resultará una locura sacar una máquina de conducción de este tipo. A nosotros también, en un sentido positivo. Gracias Porsche por seguir siendo tan "loco".