Esto es todo lo que se debería saber sobre la ITV de un coche eléctrico

Cuando compramos un coche nuevo o de segunda mano adquirimos, como conductores, una serie de obligaciones y una de ellas es la Inspección Técnica del Vehículo. Es un trámite que tendremos que pasar de forma obligatoria independientemente del modelo que tengamos en el garaje: sí, los cero emisiones también tienen que superar esta revisión. Esto es todo lo que debes saber sobre la ITV de un coche eléctrico.

Cómo pasar la ITV a tu coche sin ir a un centro ITV

Para estos vehículos los plazos son los mismos: la primera inspección tendrás que pasarla cuando se cumplan cuatro años de su matriculación. A partir de entonces y hasta que cumpla diez años tendrás que ir de forma alterna y después la revisión se convertirá en anual.

Tampoco hay cambios en la documentación: tendrás que llevar la tarjeta ITV si ya la has pasado en alguna ocasión, el permiso de circulación del vehículo y, si quieres, el seguro. El justificante de este ya no es obligatorio porque lo comprueban telemáticamente, pero ayuda a agilizar el trámite.

La ITV de un coche eléctrico

Y ahora que estamos preparados para pasar la ITV, estas serán las pruebas comunes para los coches eléctricos y para el resto: identificación, acondicionamiento exterior (carrocería), acondicionamiento interior (asientos, cinturón de seguridad, anclajes, funciones antihielo y antivaho, antirrobo y velocímetro), alumbrado y señalización, frenos, dirección, ejes, ruedas, neumáticos y suspensiones.

ITV: todo lo que debes saber para pasarla en 2021

No obstante, estos vehículos tienen una serie de elementos específicos que deben ser inspeccionados para asegurarnos que está en perfectas condiciones de circular en carretera. El objetivo, como ya sabes, es comprobar que sus características técnicas son correctas para evitar el riesgo de accidentes.

¿En qué se diferencia la ITV de un modelo tradicional de la de uno eléctrico? No hay prueba de emisiones (el capítulo que más defectos graves atesora con un 6,43%), la inspección del motor y de la transmisión será diferente porque no tienen ni embrague ni caja de cambios y, si es accesible, los técnicos comprobarán el estado de la batería y verificarán el cableado.

El resultado

Aquí tampoco hay cambios. Si tu coche eléctrico supera todas las pruebas, la ITV será favorable y recibirá la correspondiente pegatina. Si es desfavorable, sólo podrás llevarlo hasta un taller para su reparación y si es negativa tendrás que hacer lo propio, pero en una grúa porque el vehículo se considera no apto para la circulación. Cuando estén subsanados los defectos tendrás que ir de nuevo a una estación para realizar la inspección.