Coches chinos: ¿una oportunidad que no hay que dejar pasar?
¿Son los coches chinos una oportunidad que no hay que dejar pasar? En el escenario actual de precios altos, las marcas chinas se presentan como una alternativa real que muchos compradores están empezando a contemplar como muy interesantes.
La industria del automóvil vive unos últimos años algo convulsos. Primero, a finales de la pasada década comenzó la transición hacia la movilidad libre de emisiones, con el coche eléctrico como principal objetivo a alcanzar entre todos los fabricantes que conforman el mercado.
Esto, unido a las continuas amenazas por parte de Europa que prevé eliminar los motores de combustión en el futuro, generaron cierta incertidumbre en los conductores que, a día de hoy, sigue dudando sobre qué coche es el más aconsejable para comprar.
A continuación, llegó la pandemia de la COVID-19 y sacudió los mercados de una forma tan agresiva que tres años más tarde aún sufrimos sus consecuencias. La crisis sanitaria provocó también lo que se ha denominado como escasez de microchips, generando retrasos en la producción y largas listas de espera de hasta un año para recibir un coche nuevo.
A principios de 2022 se inició la guerra de Ucrania tras la invasión por parte de Rusia, con una feroz inflación que ha disparado el precio de los coches nuevos y de segunda mano.
Tampoco ayudó el incremento del precio de los carburantes y, mucho menos, la subida de los tipos de interés por parte de Europa con el objetivo de limitar la inflación, aunque esto ha provocado que financiar la compra de un coche nuevo sea aún más complicado en 2023.
Y, con este panorama, llegamos a la actualidad, en un momento en el que el mercado español aún no puede llegar al millón de unidades matriculadas anualmente (se estima que 2023 cierre con unos 950.000 coches matriculados), con los precios por las nubes, algo que también viene dado por la irrupción del coche eléctrico técnicamente más caro, y los tipos de interés disparados.
De la delicada situación de la industria automotriz europea a una oportunidad de negocio para las marcas chinas
Por suerte para unos pocos, este escenario se ha presentado como una oportunidad de mercado excepcional en el que llegar a Europa y España. Hablamos de compañías jóvenes o nuevas en este lado del mundo, especialmente a las empresas que fabrican los cada vez más comunes coches chinos.
De hecho, en los últimos años hemos asistido a la llegada de marcas como BYD, DFSK o MG, que está en un momento dulce en el que ha logrado que agosto de este año haya sido su mejor mes desde que volvió a España en 2021, logrando que el MG ZS haya sido el coche más vendido del país por delante del exitoso Dacia Sandero.
Tal es su éxito que MG ya ha vendido más de 25.000 unidades en los dos años y medio que lleva en el mercado español, un hito que demuestra la apuesta que muchos compradores están haciendo por estos coches chinos que compiten principalmente por sus precios sin rival, que permiten comprar un coche eléctrico por unos 20.000 euros.
¿Merecen, por tanto, la pena los coches chinos? ¿Son una oportunidad que no hay que dejar pasar o es mejor apostar por los vehículos que producen marcas tradicionales de Europa, Estados Unidos o Japón?
¿Son los coches chinos una oportunidad que no hay que dejar pasar?
Debemos tener en cuenta dos aspectos. El primero, el prejuicio de que los coches chinos son vehículos de baja calidad o mal fabricados es algo que debemos eliminar de la opinión pública. Desde China llegan coches cada vez mejor construidos, con mejores estándares de calidad y una excelente relación producto-equipamiento que hace que sean realmente interesantes.
El segundo, que estos coches aterrizan en el mercado español con precios muy competitivos. En MG, por ejemplo, puedes comprar un ZS desde 13.990 euros y te llevas un SUV compacto de gasolina con 4,3 metros de longitud de carrocería, cinco plazas y un maletero de 450 litros.
En BYD, por otro lado, encontrarás el nuevo Dolphin totalmente eléctrico con hasta 427 kilómetros de autonomía homologada con tres niveles de potencia (95, 177 y 204 CV) desde 29.990 euros, una muy interesante para un coche eléctrico de tamaño compacto con un maletero de 345 litros y un completo equipamiento de serie.
Por tanto, afirmar que los coches chinos actualmente representan una oportunidad de mercado que no hay que dejar pasar no es nada rocambolesco. Si buscas un coche a buen precio, equipado, con posibilidad de que sea totalmente eléctrico y que tenga una calidad de construcción que cumple con los estándares europeos, no dudes en dar el paso.
Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no tienen por qué coincidir necesaria o exactamente con la posición de Axel Springer o Auto Bild España.
Etiquetas: Coches chinos
Descubre más sobre Aarón Pérez, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.