Sólo se fabricarán 125 unidades del radical ABT RS7-R
El ABT RS7-R es una nueva muestra de que el preparador sabe lo que se hace cuando mete mano a un Audi. Ofrece un trabajo de lo más completo: imagen, interior y mejoras mecánicas que, eso sí, solo podrán disfrutar 125 afortunados (que tengan el dinero para permitírselo).
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El alemán recibe el kit de potenciación ABT Power R que, en su caso, toma su motor 4.0 V8 biturbo y lo eleva de los 600 CV y 800 Nm de par de fábrica hasta los 740 CV y 920 Nm de par máximo. Esto debe implicar una mejora sensible en sus prestaciones, pero no se han hecho oficiales sus datos. También recibe mejoras para la suspensión, como una tipo coilover y barras estabilizadoras de corte deportivo.
Todo su exterior estrena un kit de carrocería en el que predomina la fibra de carbono y que está formado por una parrilla delantera específica, un nuevo labio para el paragolpes, un difusor trasero y un alerón. A esto se suma, como colofón, unas llantas ABT High Performance HR de 22 pulgadas bastante llamativas.
ABT tampoco se olvida del habitáculo, para el que ha desarrollado un pack que combina un volante específico de corte deportivo acabado en cuero y carbono, asientos que utilizan ambos materiales, costuras de contrastes, placas identificativas, etc.
Aunque en el comunicado no se diga de manera expresa, en un listado de precios el preparador señala que el ABT RS7-R cuesta 69.900 euros, incluido el 19% de impuestos alemán, la instalación, el pintado de la carrocería y la aprobación del TÜV. También figura que extras como las llantas cuestan 7.665 euros y que el paquete interior asciende hasta los 2.580 euros.
Etiquetas: coches tuneados
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