Nos subimos al Porsche 718 Cayman GT4 ePerformance, ¡el futuro carreras-cliente de 1.088 CV!

Uno no tiene la suerte de montarse todos los días en un vehículo de hasta 1.088 CV, y menos pilotado por la primera piloto oficial de Porsche Motorsport: Simona De Silvestro. Trabajar en la mejor web de coches, autobild.es, te da una serie de privilegios como este que ni casi todo el dinero del mundo podría pagar. Así que doy gracias a mi yo de hace más de 20 años por decidirse a estudiar la carrera de Periodismo. Bueno, y a mi jefe por mandarme a cubrir esta presentación...

Estoy en el Porsche Experience Center de Franciacorta, Italia, para descubrir la decoración final del Porsche 99X Gen3, conocer parte de los planes eléctricos de la compañía de Stuttgart y probar el Porsche Taycan 2023. Pero el plato fuerte de estas dos jornadas es copilotar el Porsche 718 Cayman GT4 ePerformance.

Se trata de un prototipo muy cercano al producto final de lo que será un coche carreras-cliente totalmente eléctrico. Su imagen impresiona, como sus números: potencia máxima de hasta 1.088 CV (800 kW), 612 CV constantes durante 30 minutos, tecnología de 900 voltios...

Es el momento. Enfundado el mono, el casco con su Hans y la botas Puma, todo homologado por la FIA, y tras la charla de seguridad -recuerda que voy en una cosa metálica que es movida gracias a 900 voltios-, me monto en el asiento derecho tras un movimiento más propio de un contorsionista. 

Salimos al pit lane, donde ya se nota su aceleración. Pero eso no es nada, porque cuando pasa el semáforo... ¡maldito cohete eléctrico! ¡Qué brutalidad! Creo que no he sentido nada igual en mi vida. Y es que tanta potencia y par entregado al instante es alucinante.

También cómo toma las curvas gracias a la tracción integral -la base también influye, puesto que se trata del 718 Cayman GT4 Clubsport- y siempre acompañado de ese sonido a coche eléctrico. 

Llega la recta, y Simona sigue acelerando el Porsche 718 Cayman hasta que a 240 km/h pisa el freno. ¡Guau! ¡Como acelera, pero también como clava! 

Finalizada la segunda vuelta, y volviendo a boxes, le pregunto a Simona qué destacaría, pero también qué mejoraría. Me dice que uno de los puntos fuertes es la salida de las curvas, porque no solo depende del tren posterior. Y no mejorar, pero sí acostumbrarse es a ese delay en la frenada. Sé de lo que me habla, porque en los vehículos eléctricos de calle, como equipan frenos regenerativos, ocurre lo mismo.

Me despido de la piloto, no sin antes darle las gracias por la inolvidable experiencia que me ha hecho vivir. Y mientras me alejo y me quito el casco, pienso: "Pues esto del coche eléctrico no está tan mal, oye".