Jorge Lorenzo, cerca de ser la peor Ducati en Argentina

Esta es la parrilla de salida para el GP de Argentina en la categoría de MotoGP

Jorge Lorenzo, cerca de ser la peor Ducati en Argentina. La clasificación de MotoGP fue nefasta para el piloto mallorquín, que además de quedar en una más que discreta 16ª posición, estuvo a punto de ser el peor piloto de todos los que llevan montura italiana en la parrilla. Solamente Héctor Barberá, que saldrá el 21, tuvo un día más aciago que el flamante fichaje de la factoría de Borgo Panigale. 

El comienzo para Lorenzo no está siendo para nada positivo. Dos circuitos en los que la Ducati va bastante bien están sacando a relucir los problemas del español con su nueva moto. En Qatar ya tuvo que salir desde una posición bastante retrasada y después en carrera tampoco pudo arreglar la situación. Terminó en la undécima posición. 

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En Argentina la coyuntura tampoco es que invite al optimismo, ya que en seco el piloto mallorquín sólo pudo terminar 17º en el FP2 y no fue capaz de mejorar su tiempo en el tercer entrenamiento libre antes de que apareciese la lluvia. Lorenzo no es de esos pilotos que arregle un fin de semana negativo el domingo, por lo que le tocará sufrir hoy encima de su GP17. 

Pese a todo esto, Jorge Lorenzo se ha mostrado esperanzador sobre el fin de semana que está realizando en Argentina. A nivel de ritmo se ve bien y lo más importante es que está empezando a sentirse cómodo con la Ducati que le dieron en Valencia y que él pidió cambiar porque le parecía muy alta. Esta primera adaptación es el primer paso para que Lorenzo se haga a la moto italiana y no al revés. Además, también apuntó que en condiciones de mojado se había sentido mucho mejor que en los últimos dos años con Yamaha, lo cual quiere decir que las prestaciones de la Ducati en agua le van mejor al propio Jorge. 

El objetivo del tres veces campeón de MotoGP es intentar quedar entre el octavo y el décimo puesto. Es consciente de que el nivel actual en la categoría reina es muy alto y que su momento todavía no ha llegado. En cualquier caso, que un ganador como Lorenzo diga que su meta es cerrar el top-10 no es un comentario para nada halagüeño.