Fiat 500 o Mini de segunda mano, ¿cuál comprar?

Hoy enfrentamos a dos de los líderes del segmento de coches urbanos en España en una comparativa técnica de vehículos de segunda mano. ¿Cuál comprar, el Fiat 500 o el Mini de segunda mano? Si estás pensando en adquirir un vehículo pequeño, eficiente y a buen precio en el mercado de coches de segunda mano, es probable que te hayas topado con estos dos modelos.

Coches de segunda mano, 7 opciones para estrenar antes de terminar 2020 por menos de 5.000 euros

A continuación, vamos a analizar la primera generación del Fiat 500 (en su reinterpretación moderna, no en la de 1957), y el Mini de segunda generación, un modelo que se comercializó al mismo tiempo que el urbanita italiano. Tendremos en cuenta sus dimensiones, la gama de motores que ofertaba en la época y los precios a los que están en la actualidad.

Fiat 500 segunda mano

Lanzado originalmente en el 2007, el Fiat 500 es la reinterpretación moderna del un clásico con más de 60 años de historia. Fiat lo presentó hace ya más de una década y, desde entonces, el 500 se ha convertido en uno de los modelos con mayor éxito de la actual cartera de productos del fabricante. Se han comercializado miles de unidades en los últimos 13 años de esta primera generación del 500 moderno, por lo que es fácil encontrar bastantes ejemplares en el mercado de vehículos usados.

El 500 ofrece una carrocería con 3.546 mm de longitud, 1.627 mm de anchura y 1.488 mm de altura, con una distancia entre ejes que alcanza los 2.300 mm. Su interior cuenta con espacio para hasta cuatro pasajeros, mientras que el maletero tiene una capacidad volumétrica de 185 litros. Este primer modelo estaba disponible con motores de gasolina como el 1.2 litros de 69 CV, el 1.4 litros de 100 CV y el 0.9 TwinAir Turbo de 85 CV, así como diésel como el 1.3 Multijet de 75 y 95 CV. Existían versiones con cambio manual y automático, todas ellas de tracción delantera.

En cuanto a los precios del Fiat 500 de segunda mano, las cifras arrancan en los 3.000 euros, sin importar el año de matriculación ni el kilometraje recorrido. Esto para la versión coupé, ya que el 500 Cabrio es algo más exclusivo y existen menos ejemplares a la venta. Los precios comienzan en unos 7.000 euros.

Mini segunda mano

La segunda generación del Mini se dio a conocer en 2006. El modelo surgió de nuevo en el año 2000, después de que se diera por finalizada oficialmente la producción del vehículo original de 1959. Su retorno como un Mini más moderno fue una reinterpretación de la marca por parte de BMW, a quien pertenece la compañía. En las últimas dos décadas se han comercializado tres generaciones del Mini diferentes.

La generación R56 del modelo se introdujo hace más de 10 años y presentaba una carrocería de medidas muy compactas con 3.699 mm de longitud, 1.683 mm de anchura y 1.407 mm de altura, todo ello sobre una plataforma con 2.467 mm de distancia entre ejes. El interior ofrece espacio para hasta cuatro pasajeros, mientras que el maletero presenta una capacidad volumétrica de 160 litros.

A nivel mecánico, el Mini de segunda generación estaba disponible con motores de gasolina como el 1.6 litros de 75 CV, 98 CV y 120 CV, el 1.4 litros de 95 CV y el 1.6 turbo de 175 CV y 184 CV (Cooper S) y 211 CV (John Cooper Works). También se ofertaban mecánicas diésel, como el 1.6 litros de 90 CV y 109 CV. Había versiones con cambio manual y otras con una transmisión automática, todas ellas de tracción delantera.

El mercado de Mini de segunda mano es algo más limitado que el del 500, pero hay cientos de ejemplares a la venta. Sin importar el año de matriculación ni el kilometraje recorrido, hay ejemplares desde unos 2.000 euros a la venta. En el caso de la versión Cabrio, las tarifas aumentan hasta unos 4.000 euros.

¿Cuál comprar?

Como puedes contemplar, el Mini de segunda mano es un coche más grande y con motores más prestacionales que los de su rival italiano. Sin embargo, el Fiat 500 de segunda mano ofrece un maletero ligeramente más grande y una cotización más elevada en el mercado de vehículos usados. Por el 500 pagarás algo más, pero podrás revenderlo a mayor precio que el Mini. Las limitaciones en cuanto a potencia y variantes de motor es algo que debes tener en cuenta en función del uso que vayas a hacer del vehículo.