Entrevista a Markus Schäfer, CTO de Mercedes: "Las marcas chinas no son competencia para nosotros"

Siempre es interesante conversar con un alto directivo de un gran fabricante de coches, pero si te enfrentas a un ingeniero mecánico, como Markus Schäfer (57), que lleva trabajando en Mercedes-Benz desde 1990, es decir, 32 años ya, sabes que lo que te va a contar tiene mucho peso.

Y tiene peso no sólo porque sea uno de los miembros del consejo de administración de la marca y actual CTO (director de Tecnología, Desarrollo y Adquisiciones), sino por su gran experiencia y por el profundo conocimiento que tiene de la compañía, ya que ha recorrido todos los puestos posibles desde la base a la cúpula.

Tuve ocasión de reunirme con el señor Schäfer en el Magical Garage que Mercedes montó en París, de forma paralela al propio Salón de París. Y lo primero que quise preguntarle es si con sus nuevos eléctricos, quizás todos demasiado parecidos en diseño, pretendía conquistar más a sus clientes por la tecnología y las experiencias que ofrecen. En resumidas cuentas, si Mercedes pretende convertirse en una compañía tecnológica.

Pero él me respondió que no exactamente: "La experiencia sensorial es una parte. Digamos, la de crear deseo. Pero lo que hace que un cliente quiera un Mercedes es la marca en sí. Los Mercedes son coches para gente VIP. Quien quiere un Mercedes quiere sentirse VIP. Ya sabes, quiero conducir a un museo, a una cena y quiero aparecer con un Mercedes, porque me gusta la marca".

Yo le comento que precisamente en los últimos años ha ganado muchos clientes por la parte baja de su gama, no con sus modelos más lujosos. Y me lo confirma, pero me adelanta un cambio de rumbo:

"Tenemos que trabajar en la imagen de marca. Tenemos que trabajar en nuestra cartera de productos. Tenemos 42 modelos diferentes. Y se puede discutir si la clase B representa lo que queremos ser. Y en los últimos 10-15 años, cambiamos nuestra cartera, especialmente en el segmento de entrada. Pero siempre hemos sido una empresa de lujo desde hace 130 años. Si visitas nuestro museo enseguida te das cuenta. Esta fue siempre nuestra historia y nuestra estrategia de crecimiento"

"En los últimos 15 años hemos crecido mucho en volumen, pero añadimos mucha complejidad en el segmento inferior, un poco alejado del lujo. Así que ahora queremos remodelar el extremo inferior del nivel de entrada. Ahora tenemos siete modelos compactos en el nivel de entrada, lo que creemos que es demasiado complicado".

Lo que me sorprendió conversando con Schäfer es su sinceridad, porque incluso reconoció que algunos Mercedes no tienen la calidad que deberían: "Algunos de nuestros modelos, desde el punto de vista del diseño y por su enfoque, probablemente no sean lo que Mercedes debería ser". 

"Así que vamos a comenzar con un nivel de entrada con una forma y estilo diferente, con un enfoque diferente en tecnología. Así que estamos ajustando los segmentos de entrada, para lograr menos complejidad de gama, reducir el número de modelos".

Pero, volviendo al tema de la tecnología y las sensaciones que 'venden' sus coches...

"Sí, si tienes un Mercedes, siempre es una experiencia especial. Por los materiales que tocas, por la tecnología que equipa. Y a eso es lo que llamamos la experiencia sensorial, algo que simplemente comprendes con tus sentidos. Ya sabes, escuchas algo, ves algo en el coche, la fragancia que tiene... Con esto queremos llegar al siguiente nivel".

Por supuesto, también en lo relativo a la tecnología. Y sobre esto me comenta: "Las personas no quieren perderse en el coche las cosas a las que ya están acostumbradas fuera de él. Quiero decir, quieres tener Spotify, ¿verdad? Quieres tu Apple Music, quieres tu música de Amazon, tal vez quieras tu Amazon Prime, incluso tu Netflix. Queremos traerlo todo a nuestra propia plataforma. Por lo tanto, somos el creador de nuestra plataforma eléctrica y electrónica, y conectamos y usamos estas aplicaciones que prefieren nuestros clientes". 

La idea es que "simplemente se sientan en el vehículo, la cámara reconoce quién conduce y no tienes que hacer nada. Empieza antes de que te des cuenta, te acercas, la puerta se abre porque el coche sabe que vienes. No tienes que tener ni siquiera una llave y tal vez la puerta se abra automáticamente. El coche sabe que eres tú y carga tus cuentas personales. Incluso si estás en piloto automático de nivel tres puedes hacer una videoconferencia. Lo único que puedes hacer en este momento es dormir".

Y ya que me lo sirve en bandeja, no puedo evitar plantearle el tema de la conducción autónoma. Y reconoce que tienen grandes planes sobre esto: "Todo el mundo está en el nivel dos. Pero en el nivel dos el conductor está al mando. En el nivel tres la responsabilidad se traslada al coche, porque puedes quitar las manos del volante y los ojos en la carretera y hacer otra cosa legalmente". 

"Y solo hay una empresa que ha logrado la certificación de nivel tres, y esa es Mercedes con el Clase S". Sobre lo que cabe preciar que en Europa todavía no está permitido quitar las manos del volante. 

"Además, estamos tratando de hacer esta certificación de nivel tres también en EEUU, donde el proceso debe estar aprobado dentro de los próximos seis meses. Y vamos a aumentar las capacidades paso a paso. Para ello estamos trabajando con NVIDIA y de aquí a 2040 podría llegar el nivel 4 o incluso 5 (sin volante) de conducción autónoma".

Como resumen sobre esto es más que claro: "Ya somos una empresa de tecnología de lujo. En realidad siempre hemos sido una empresa de tecnología, según cómo definas eso".

Imposible no hablar sobre coches eléctricos, con la gran ofensiva de modelos que estñán presentando todas las marcas, incluñida Mercedes. Pero lo que todo el mundo se plantea es ¿cuándo se igualará el precio de un coche eléctrico con el de los de combustión?

"Eso va a tardar mucho más de lo que la gente cree. La principal diferencia está en el precio de las baterías y con la crisis actual y el encarecimiento de los materiales se está incluso abriendo más esa brecha".

"Se predijeron 25 años desde el lanzamiento de los primeros eléctricos. Pero será bastante más. El cambio realmente dramático solo podría venir con el cambio de química de las baterías, como una química basada en azufre, por ejemplo".

¿Quizás las baterías en estado sólido puedan suponer ese cambio? "Bueno, estamos trabajando en ello con dos inversiones y nuevas empresas, una en los EEUU y otra en el sudeste asiático. Pero esto no es nada que vaya a madurar en los próximos 3 o 4 años. Creo que tomará más de cinco o seis años hasta que veamos el avance".

No puedo evitar hablarle de nuestro mercado y sobre el papel que representa para Mercedes a nivel global: "Bueno, se debe terminar de realizar una transición hacia el vehículo eléctrico para que gane protagonismo. Sé que en España hay restricciones de entrada, sobre todo al centro de las ciudades más grandes, lo que favorece ese cambio. Pero la red de carga aún debe mejorarse". Y deja un recadito para los que mandan: "El Gobierno debe tener más iniciativa". 

Y para terminar le lanzo una duda personal que tengo y que posiblemente muchos compartan conmigo: los fabricantes chinos. Están llegando en manada y con coches incluso con aspiraciones premium. ¿Mercedes considera a las marcas chinas competencia? ¿Cómo va a luchar con todos ellos?

Responde confiado y muy convencido de lo que dice: "Bueno, no luchamos contra ellos. No los consideramos competencia. Nosotros, como le digo, llevamos en esto muchos años y tenemos mucho terreno ganado".

"Somos extremadamente exitosos en China. China es el mercado más grande. Somos el fabricante de automóviles de lujo número uno en China en los últimos diez años, tenemos varias fábricas allí. Lo que quiero decir es que la competencia no es solo china, es mundial".

"Tener miedo o pensar que son mejores no es una buena manera de actuar. Los competidores vienen de los Estados Unidos, vienen de Europa, vienen de Japón, vienen de Corea. Y China no es más que otro rival más. 

"No tenemos miedo, pero, por supuesto, estamos observando a la competencia y mirando lo que están haciendo. Y eso es bueno, porque nos ayuda a, en algunos casos, aumentar nuestra velocidad en algunas áreas".