Concesionario Skoda deja conducir un BMW para comparar
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Cuando estás muy seguro de tu producto, haces cosas que serían impensables de otra forma. Es lo que hay hecho un concesionario Skoda en Irlanda, que deja conducir un BMW para que los clientes puedan compararlo con su buque insignia: el Skoda Superb.
Así que los clientes que se acerquen a probar la berlina de la marca checa tendrán oportunidad de subirse al BMW Serie 5 y realizar una prueba de conducción para poder comparar ambos vehículos. ¿Una locura?
Puede... pero también una auténtica muestra de confianza por parte de Skoda, pues el Superb se encuentra a un segmento más inferior mientras que el de la marca de la hélice pertenece al selecto club de los 'premium'. Además, la diferencia de precio entre ambos es considerable también: unos 18.205 euros más es lo que cuesta el alemán.
Aunque las comparaciones sean odiosas, está claro que Skoda pretende así mostrar que un coche más barato puede ser una buena alternativa a modelos que juegan en una liga superior.
Descubre más sobre Rebeca Álvarez, autor/a de este artículo.
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