BMW I Vision Dee, un prototipo para adelantar cómo se conducirá el futuro Serie 3

En el CES Las Vegas, BMW ha mostrado cómo serán sus coches a partir de 2025. Lo ha hecho a través de un prototipo, el BMW I Vision Dee, que a priori no derivará directamente en ningún modelo de producción, pero que por formato es bastante probable que establezca las bases de cómo será el futuro BMW Serie 3.

Hablamos de Serie 3 porque lo más probable es que la próxima generación de la berlina media siga teniendo versiones de combustión (la actual vio la luz en 2018 y se ha actualizado dos veces, la última en 2022), pero también habría que hablar de BMW i3, nombre que probablemente tenga la variante eléctrica de la que dispondrá.

El BMW I Vision Dee es bastante innovador en ciertas áreas y lo más probable es que muchas de las novedades que propone no lleguen a producción, pero otras es posible que sí y algunas, de hecho, ya están confirmadas. 

Entre estas últimas está el Head-Up-Display avanzado, una evolución del sistema que llegará a toda la gama en dos años y que opta por aumentar drásticamente el tamaño del HUD, pasando de la pequeña pantalla proyectada sobre el volante a ocupar todo el ancho del parabrisas.

Esto tiene ventajas considerables, como el hecho de tener una superficie de visualización mayor (sin impedir la visibilidad pues se limita a la parte baja del cristal), así como la posibilidad de elegir que “ventanas” de información se muestran, ordenarlas al gusto, etc. Esto es parte del BMW Mixed Reality Slider, cuya llegada a modelos de calle aún no se ha confirmado.

Un aspecto que es bastante posible que se traslade al nuevo BMW Serie 3 es el lenguaje de diseño que presenta el concept. No queremos decir que la berlina vaya a ser exactamente así, pero sí sería viable un giro hacia un diseño más minimalista e incluso de corte retro, que apuesta por las formas sencillas.

Las dos novedades que creemos que es un poco pronto para ver en 2025 son el conjunto frontal digital, que es capaz de crear expresiones faciales para comunicarse con el conductor, y la carrocería formada por paneles con tecnología E Ink, muy vistosa porque permite cambiar de color, pero cara como para dejar el coche en la calle y que algún “gracioso” haga de las suyas.