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Prueba del Lamborghini Aventador SVJ sobre circuito

Cerca de Chequia, está Lausitzring, el circuito sobre el que probamos este Lamborghini Aventador SVJ. Estas palabras tienen una trascendencia en la historia de Lamborghini. Jota (referido como una adición a las normas FIA) se utilizó por primera vez para un Miura. Fue el piloto Bob Wallace quien entonces ayudó a desarrollar ese coche hasta elevar su potencia al máximo posible. 

Fue entonces cuando el fundador de la marca, Ferrucio Lamborghini decidió vender aquella locura llamada Miura Jota a un millonario. No hubo ni una serie de coches llamados así y la unidad en concreto acabó sus días calcinada en la cuneta de una carretera italiana.  

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En todo esto hay material más que de sobra para hacer del Jota un mito del automóvil. Más aún si se tiene en cuenta que Ferrucio no quería tener nada que ver con la competición, lo que él quería era crear el GT perfecto. En todo caso, hubo algunos Lamborghini Jota después cuando algunos SV tomaban una sobredosis de vitaminas en la planta de Lamborghini a petición de clientes. 


La firma italiana usó más tarde la abreviatura algunas ocasiones, pero con poco entusiasmo. El Jota desarrollado por Wallace parecía inigualable: 440 CV en lugar del 370 del automóvil de fábrica, lubricación por cárter seco, dos tanques de 60 litros, algo menos de 900 kg de peso en lugar de los alrededor de 1.300 del Miura. El Lamborghini Jota debió ser un coche con una increíble fuerza bruta y con un manejo sobresaliente.


El 12 cilindros del Aventador superior

Eso es lo que debería decirse al hablar del Lambo de calle más potente y rápido de todos los tiempos: el Aventador SVJ, el Superveloce Jota, que se basa en el Aventador S de 2017 y que salió al mercado en dos versiones. Lamborghini apareció para la presentación en Pebble Beach con el SVJ 63 para conmemorar su cumpleaños con una edición limitada a 63 copias. 

Sin embargo, para un grupo de clientes un poco más extenso, se confeccionó la serie Lamborghini Aventador SVJ "normal", de la cual se fabricarán 900 piezas. En este momento, esta la variante más bestia del Aventador, basada en el S, que introdujo la dirección del eje trasero, con 770 CV (720 Nm) y un aumento en hasta 200 revoluciones en las vueltas del motor, le dan para mucho más. En términos de peso, está 72 kg por debajo del S, pero aún son 1.736 kg.

Demasiado quizá en comparación con el Lambo Miura Jota original. Si Ferrucio levantara la cabeza, porque además el 6,5 litros que hay en la parte trasera, tampoco es el motor V12 más potente, ya que este se encuentra en el Ferrari 812 Superfast, aunque eso sí, el Aventador es más matón y rudo que el coche de Maranello. 


La aerodinámica inteligente del Huracán

Lamborghini implementó la Ala (Aerodynamica Lamborghini Attiva), un refuerzo aerodinámico introducido en el Huracán Performante, que rompió brevemente el récord de Nordschleife del Porsche GT2 RS. Así el Aventador SVJ es probablemente la penúltima edición del Aventador, que ahora ya tiene ocho años, y que ha logrado su objetivo con gran éxito: posicionar el ADN V12 de Lamborghini de una manera más deportiva que su predecesor, el Murciélago, que nunca estuvo a una distancia sorprendente de un Porsche 911. En el horizonte, se dibuja cautelosamente la melancolía, porque el sucesor también deberá tener en cuenta los nuevos tiempos: claro que habrá más V12 de Lambo, pero estos ya serán híbridos. 


El Lamborghini Aventador SVJ, sobre circuito


Ir por debajo de los tres segundos hasta 100 km/h es una tarea difícil. Cada décima más es una dura lucha que no se puede ganar solo con más poder. Así que no es de extrañar que el SVJ, con sus 30 CV, solo acelere un poco más que el modelo básico: llega a 100 en 2,8 segundos. Al llegar a 200 km/h (8,7 s) y 300 km/h (24,0 s), la distancia con el Jota de serie se ha difuminado. El Aventador SVJ que probamos sobre circuito, sin embargo, puede desarrollar su ventaja mejor sobre circuito, ya que se supone más manejable. 

El SVJ es el primer Aventador donde el freno no solo es estable y efectivo, sino que su tacto se va a adaptando, incluso después de algunas vueltas rápidas. El SVJ también es superior en términos de rendimiento. Después de 30,4 metros, el Lambo se encuentra a 100 km/h, a 200 km/h llega tras recorrer 125,3 metros, un rendimiento extremadamente bueno.

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Quien no sienta placer de conducir en un Aventador SVJ es un enemigo del automóvil o está muerto. El motor V12 solo tiene diversión sin fin que ofrecerte. El manejo ha mejorado mucho con la dirección de la rueda trasera, tan buena como lo es con un superdeportivo de dos metros de ancho. En el slalom de 18 metros, el bólido es muy ágil, la dirección es agradablemente directa y muy comunicativa.

El chasis SVJ es extremadamente duro. Demasiado difícil para este circuito, porque el tiempo de vuelta no es mejor que 1:29.19 minutos. Sobre este circuito, al Aventador SVJ no le benefician algunas ondulaciones, sobre las que casi salta y pierde tracción. Pero el Lambo se adapta bien a las curvas cerradas, las más rápidas que deben completarse de la manera más neutral posible. Aunque en algunos giros, hemos notado que las Pirelli P Zero Trofeo R daban algo de subviraje con este coche. 

Valoración

Nota9

Probamos el Lamborghini Aventador SVJ en donde debe ser: sobre un circuito. Y es que, aunque no le duró demasiado, este coche batió el récord de Nürburgring.

Lo mejor

El sonido del motor V12. Si no disfrutas co él, estás muerto o no te gustan los coches. 

Lo peor

Lo lejos que tú y yo estaremos siempre de tener uno en el garaje.

Etiquetas: Superdeportivos

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