Los cambios que ha introducido el nuevo Ford Focus ST van en la línea de afilar todavía más su respuesta. La suspensión presenta nuevos muelles delanteros y un reglaje de amortiguadores más duro, que son más deportivos en ambos ejes. En combinación con las barras estabilizadoras específicas de este modelo dan un resultado excepcional.
La dirección asistida eléctrica es bastante directa y ha sido ligeramente recalibrada respecto a la generación precedente. De hecho, solo tiene 1,8 vueltas entre topes. Pero adolece del mismo problema que ya tenía antes. En fases de aceleración, al Focus ST le cuesta transmitir la potencia al suelo y la dirección flota ligeramente y complica el guiado del coche.
Sin duda, el nuevo ST es un coche ágil y dinámico, con un paso por curva rápido y estable. Y eso es algo que nos ha enamorado de este modelo... Lo hemos probado a fondo y esto es lo que nos ha parecido. ¿Te vas a perder el vídeo? Dale al play!!