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Prueba del Ferrari F8 Tributo. ¿El Ferrari más ágil de la historia?

El Ferrari F8 Tributo debería tener lo mejor del 488 GTB y el Pista. Lo comprobamos en el circuito de Lausitzring

Solo se parece al Ferrari 488 GTB a primera vista, pero aparte del chasis ‘space-frame’ de aluminio y el concepto de motor central, no permanece mucho más. El diseño del Ferrari F8 Tributo rinde homenaje a los modelos de los últimos 44 años.

Ferrari F8 Tributo

Ronald Sassen / AUTOBILD

Al mismo tiempo, los diseñadores han implementado en este Ferrari mejoras en la aerodinámica y la cuestión térmica. Así surgieron, por ejemplo, los faros LED compactos con ventilación de freno adicional.

La zaga

Echemos un vistazo a la parte trasera: para una mejor ventilación/refrigeración y ahorro de peso, el capó con rejillas está hecho de plástico Lexan. ¿Te suena? Efectivamente, del F40. Las cuatro luces traseras parecen haber sido copiadas de esta leyenda.

Ferrari F8 Tributo escapes

Ronald Sassen / AUTOBILD

No encontramos un alerón inmenso como de costumbre, pero sí un difusor enorme con flaps activos, que aporta un 10% más de carga aerodinámica que en el 488.

F8 Tributo zaga

Ronald Sassen / AUTOBILD

Y ya que estamos en el tema de la aerodinámica: entendemos que se necesitan cámaras de 360 grados para una posible usabilidad diaria. Pero, por favor, que no se limiten a ponerlas en los retrovisores exteriores. Eso podría haberse hecho mejor y también más simplificado.

El motor

En comparación con su antecesor, el V8 biturbo de 3.9 litros es 18 kilos más ligero y planta 720 CV y 770 Nm en el cigüeñal. Más que suficiente para un vehículo con un peso de solo 1.498 kilos.

Motor F8 Tributo

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Por dentro

Consola central con bracillos de carbono conocidos para operar la caja de cambios, buena sensación de espacio y controles en el volante que, a veces, resultan complicados. Nunca te acostumbras a los botones de los intermitentes en el volante.

Botones F8 Tributo

Ronald Sassen / AUTOBILD

Los asientos deportivos en Alcántara son perfectos para circuito, no tanto para largas distancias.  Los programas de conducción se seleccionan con el interruptor giratorio Manettino en el volante y la configuración del chasis, ESP y demás. 

Cockpit F8 Tributo

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¡Arrancamos!

Pasamos a modo "Race" y nos ponemos en faena. Enseguida me queda claro que el Tributo no puede simplemente lanzarse a las curvas como un Porsche 911 Turbo S. El F8 necesita un poco más de sensibilidad en el volante y el pedal del acelerador. 

F8 Tributo curva

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En el primer sector, por ejemplo, esto significa tomar la entrada a la curva con tiento, dirigirse hacia el vértice con mano firme y asegurarse de que su gigantesco par se pueda volver a utilizar lo más rápido posible. 

¿Retraso del turbo? Nada de eso queda aquí, porque con la nueva puesta a punto el motor se comporta casi como un atmosférico. Incluso cuando todas las luces del volante están parpadeando, el ocho cilindros todavía está lleno de energía.

Curva trasera F8 Tributo

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La tracción con bloqueo electrónico, gomas Michelin Cup 2 y motor en el eje trasero es una configuración impresionante, pero hablamos de 770 Nm, de modo que tienen su sus límites. En cualquier caso, subviraje es una palabra extranjera para el F8, ni siquiera si el freno cerámico se pisa al límite.

Catapulta

El Tributo aprovecha al máximo su potencia en las tres rectas largas, la transmisión de doble embrague cambia como de costumbre rápidamente y sin perturbar el impulso. Pocas veces habíamos logrado los 240 km/h tan a menudo al final del sector dos.

Morro del F8 Tributo

Ronald Sassen / AUTOBILD

El nuevo launch control, aún más afinado, empuja al F8 hasta los 100 km/h en unos ridículos 2,8 segundos, a 200 en 7.8, a 300 en 20.1 s. Vale, un McLaren 720S solo necesita 19,4 s para esto último, pero un 911 Turbo S es seis segundos más lento. 

En cuanto a recuperaciones, arrasa con la competencia: el 720 y el 911 Turbo S necesitan 8,8 y 10,5 segundos, respectivamente, para pasar de 80 a 120 km/h en la marcha más alta. ¡Al Ferrari le bastan 4,9 segundos!

Y al frenar…

… el F8 finalmente está a la altura de la competencia. Especialmente con el nivel de control ABS y la sensación del pedal. Sin embargo, nota lo mucho que se hunde la parte delantera al frenar. Los prodigiosos 30,6 metros en los que se detiene desde 100 km/h se deben en gran parte al agarre de los Michelin.

Lateral del F8 Tributo

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En resumen

Casi ningún otro automóvil en esta liga es tan ágil cuando se le coge el punto. ¿Qué significa en cifras? 1: 29,06 minutos en la mejor vuelta. Más rápido que el 911 Turbo S, más lento que un Lamborghini Huracán Evo.

F8 Tributo conos

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En cuanto al consumo, el F8 es incluso comedido: 15,5 litros a los 100 kilómetros con 720 CV son una muy buena cifra. Ojo que el consumo oficial que dan en Ferrari es de 10,6 litros. ¿Se pasan de optimistas?

Valoración

Nota9

El Ferrari F8 Tributo debería tener lo mejor del 488 GTB y el Pista. Lo comprobamos en el circuito de Lausitzring, y ya te adelantamos que es una máquina de pilotar

Lo mejor

Respuesta del motor, agilidad en curvas, aceleración en recta, recuperaciones

Lo peor

La usabilidad diaria no es su fuerte: los asientos no son aptos para trayectos largos

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