Prueba: Dacia Duster TCe 150 2WD Facelift
El nuevo Dacia Duster no solo mejora, sino que además alcanza una inmejorable relación calidad/precio. Ya lo hemos probado
Nuestro Dacia Duster entrega 150 CV, lleva doble embrague, un equipamiento generoso en el acabado Prestige y su diseño no admite reproche alguno. Por poco más de 20.000 euros, es un coche redondo.
Los acabados del Dacia, claro, no están entre los mejores, pero son más que correctos y, sobre todo, sólidos: cero traqueteos ni ruidos parásitos, los asientos se sienten firmes en todo momento, las juntas de las diferentes piezas, dentro y fuera, no tienen ninguna holgura excesiva.
La proporción de plástico duro es más alta que la media, pero como decimos, los ajustes sí que rayan a gran altura. Los apoyabrazos de las puertas y los de la consola central están hechos de cuero sintético, lo que sí transmite cierta sensación de valor.
En general, cómodo
Lo mismo se aplica a los asientos renovados, que, con su tapizado más firme, ofrecen más comodidad en viajes más largos. Sin embargo, si superas los 1,90 metros de altura, no encontrarás una posición óptima para sentarte. Simplemente no hay suficientes opciones de ajuste aquí.
En la fila dos hay pocas razones para quejarse, la banqueta agrada con una tapicería cómoda y suficiente apoyo. Además, en todos los asientos, la entrada es muy fácil gracias a las puertas de amplia apertura y la buena altura del asiento.
El maletero no es tan cómodo (445 a 1478 litros). Con el asiento trasero abatido, todavía tienes que arrastrar objetos pesados y voluminosos sobre un escalón considerable.
¡En marcha!
El bajo precio de entrada tiene que venir de alguna parte, por ejemplo, de la dirección del Duster. La poca precisión y casi ausencia de comunicación no invitan a una conducción dinámica, pero básicamente van con el carácter relajado de este coche.
El chasis es muy francés, esto es, blando, por lo que filtra bien y transmite suavidad, pero olvídate de enlazar curvas como un loco. Tómatelo con relajación, algo que te repite el ESP cada vez que entra en acción tempranamente.
El motor turboalimentado de cuatro cilindros y el cambio de doble embrague de seis velocidades también van mucho con el carácter del coche. Es cierto que ahora la respuesta es un poco más viva que en su predecesor, pero las prestaciones no son para tirar cohetes.
Y es que el nuevo DKG es bastante equilibrado y fluido, pero actúa con mucha lentitud cuando se exige aceleración pura. Que el consumo no supere los moderados 7,4 litros, se debe a su comedido peso en vacío de poco más de 1,3 toneladas
Equipamiento
El sistema de infoentretenimiento es extremadamente fácil de usar gracias a sus funciones: apenas existentes. No te preocupes, porque Apple CarPlay y Android Auto se comunican de forma inalámbrica con el sistema, para que puedas sortear el próximo atasco de forma segura.
Solo tenemos que reprochar al Duster en pequeña medida, en el capítulo sobre equipamiento, los asistentes de seguridad, porque la lista de extras no muestra casi nada aquí. Sin frenada de emergencia, sin advertencia de salida de carril ni de tráfico cruzado… Al menos sí hay alerta de punto ciego.
El Duster conserva, en cualquier caso, su título de símbolo de raciocinio, para quien no necesita cosas superfluas y paga lo justo por un coche que, ahora más que nunca tras el lavado de cara, puede ser plenamente satisfactorio.
Valoración
El nuevo Dacia Duster no solo mejora, sino que además alcanza una inmejorable relación calidad/precio. Ya lo hemos probado
Lo mejor
Relación calidad/precio, ajustes, confort, consumos contenidos
Lo peor
Dirección imprecisa, poco equipo de seguridad, mucho balanceo en curvas
Etiquetas: SUV, SUV compacto
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