¿Por qué vibra el acelerador?

Los coches vibran, es normal, tienen multitud de piezas mecánicas en continuo funcionamiento y con el tiempo, es de recibo que se empiecen a notar ciertas vibraciones. Lo que no es habitual es que estas sean exageradas o que se produzcan solo en momentos concretos, como puede ser al acelerar. Es una sensación extraña y que puede preocupar a los conductores que les toque sufrirlo pero, ¿por qué vibra el acelerador?

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Las causas pueden ser muchas, pero dependen de las circunstancias concretas en las que se produzca la vibración, lo que puede servir para descartar unas u otras y así afinar más para encontrar qué es lo que la está causando.

Embrague

Es posible que sea el embrague el que las produzca debido a estar mal equilibrado. Sin embargo, para que esta sea la causa, tendría que vibrar siempre a unas revoluciones determinadas, incluso estando parado o en punto muerto. Si no es así, hay que descartar esta opción.

Tacos del motor

Una pieza priori pequeña y a la que no se presta mucha atención… hasta que se rompe. Estos tacos unen el motor al chasis y, a la vez, amortiguan las vibraciones que provoca el bloque por su funcionamiento natural. Si se desgastan o se rajan, el propulsor puede cabecear dentro del vano motor, provocando vibraciones más fuertes o incluso golpes que se notan al acelerar, aunque esto se sentiría además de en el pedal del acelerador en otras partes.

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Equilibrado de ruedas

Una causa algo más genérica, pero que puede cuadrar con el caso. Si las ruedas no están equilibradas suelen producir vibraciones, sobre todo a velocidades medias-altas de entre 90 y 120 km/h. Aunque se notan en el acelerador al subir de velocidad, también se transmiten por el salpicadero, si el problema está en el eje delantero, o en las plazas posteriores, si está en el trasero.

Junta homocinética

Se trata de una pieza compleja e importante en el funcionamiento del coche. Su función es la de conectar dos ejes para que se produzca un movimiento continuo, consiguiendo que por un lado las ruedas no pierdan tracción y por otro que la transmisión no sufra. Está sometida a bastante castigo, ya que soporta tanto los giros de la dirección como los movimientos de la suspensión, y si está en mal estado provoca vibraciones al acelerar.

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