Bosch presenta dos innovaciones pensadas para salvar vidas

En el recientemente clausurado CES 2020, el Salón de la Electrónica de Consumo que cada año congrega en Las Vegas a las últimas innovaciones tecnológicas, Bosch ha presentado dos novedades que están llamadas a revolucionar el mundo de la automoción. 

Ambas buscan mejorar la seguridad del conductor y sus ocupantes. Y aunque puedan parecer salidas de una película de ciencia ficción, es posible que las veamos en la calle no tardando mucho.

Sensores que miran al interior para salvar vidas

Estamos acostumbrados a coches que llevan (o anuncian) multitud de sensores para hacer más sencilla y segura la conducción. Pero ¿y si en lugar de analizar lo que sucede en la carretera registraran el interior del vehículo? No se trata de espiar la actitud del conductor y sus ocupantes, sino de adelantar determinados acontecimientos que pueden llegar a provocar un accidente: fatiga, distracciones...

Un estudio reciente asegura que seis de cada 10 conductores han sufrido microsueños al volante. Muchos de ellos solo pudieron contestar cuando se les explicó que los microsueños son lapsos de dos o tres segundos en los que el piloto se queda literalmente dormido, cierra los ojos y pierde la consciencia. Lo peor de todo: son culpables de, al menos, el 24% de los accidentes que se producen cada año.

Los detectores de somnolencia empiezan a ser habituales en el equipamiento de los coches de última generación. Lo de Bosch va un paso más allá: un nuevo sistema de monitorización interior con cámaras e inteligencia artificial (AI). "Si el automóvil sabe lo que hace su conductor y sus ocupantes, conducir será más seguro y más cómodo", explica Harald Kroeger, miembro del Consejo de Administración de Robert Bosch GmbH. 

La idea de Bosch pretende mejorar la conducción autónoma. Se centra en esos momentos en los que el sistema de conducción automatizada del vehículo decide que debe pasar de nuevo la responsabilidad de la conducción al ser humano, pero este no está preparando para ello porque está durmiendo, leyendo el periódico o viendo una película.

"A 50 km/h, un vehículo recorrerá 42 metros sin supervisión si el conductor se queda dormido o mira su teléfono tan sólo durante tres segundos", explica Bosch. Lo mismo sucederá si el coche le transmite la responsabilidad de la conducción, pero no está preparado para asumirla.

Para ello, el sistema de monitorización interior de Bosch, utiliza una cámara integrada en el volante que detecta la pesadez de los párpados del conductor, cuándo está distraído y cuándo gira la cabeza hacia el acompañante o hacia los asientos traseros. También es útil cuando el conductor desempeña este rol: gracias a la inteligencia artificial (AI), el sistema saca las conclusiones correctas de esta información y advierte a los conductores desatentos, recomienda un descanso o, incluso, reduce la velocidad del vehículo, dependiendo de los deseos del fabricante de automóviles y de los requisitos legales.

En caso de que el conductor esté distraído, cansado... el sistema emite una alerta adecuada a la situación y activa los sistemas de asistencia que interesan en cada momento.

Pero hay más...

Otra cámara instalada encima o debajo del espejo retrovisor controla todo el habitáculo. De esta forma, reconoce si los niños se han desabrochado los cinturones de los asientos traseros y advierte al conductor. También si un acompañante sentado en el asiento trasero se inclina demasiado hacia adelante o pone los pies en el asiento de al lado, de manera que los airbags y los pretensores del cinturón no podrán protegerle adecuadamente en caso de accidente. 

Entre las mejoras de seguridad que ofrece esta segunda cámara de monitorización unida a otros sensores:

• determinar en qué posición están sentados y configurar los airbags y los pretensores para garantizar la mejor protección posible
• evitar que el airbag del asiento del pasajero delantero se despliegue si hay un capazo de bebé en el asiento
• reconocer que algún niño ha quedado dentro del coche  y advertir a los padres al instante enviando un mensaje a su teléfono
• en caso de urgencia, también puede alertar a los servicios de emergencia

El sistema de monitorización interior de Bosch puede entrar en producción en 2022. Ese año, la UE obligará a equipar de serie en los vehículos nuevos una tecnología que advierta a los conductores sobre la somnolencia y las distracciones.

Y que reducen el peligro que llega desde el exterior 

Si aquél estudio habla de que el 80% de los conductores ha sufrido somnolencia al volante, el fenómeno al que hace frente el segundo invento de Bosch es conocido por el cien por el cien de los pilotos. Hablamos de algo tan común y peligroso como los deslumbramientos.

Bautizado como Virtual Visor se trata de un LCD transparente y una cámara intuitiva, que reemplaza por completo al tradicional parasol del vehículo. La tecnología de Bosch utiliza algoritmos inteligentes para bloquear el resplandor del sol, pero no la visión de la carretera como si lo hacen los parasoles convencionales.

Explicado de forma sencilla, la tecnología antideslumbramientos de Bosch:

• conecta un panel LCD con una cámara interna que monitoriza la sombra proyectada por el sol en la cara del conductor
• el sistema utiliza inteligencia artificial desde la cámara para localizar al conductor dentro de la imagen y la AI para determinar los puntos de referencia en la cara, incluido el lugar donde se encuentran los ojos, la nariz y la boca, para que pueda identificar las sombras en la cara
• después, el algoritmo analiza la vista del conductor, oscureciendo solo la sección de la pantalla a través de la cual la luz deslumbra los ojos del conductor. El resto permanece transparente, sin oscurecer gran parte del campo de visión del conductor

El Virtual Visor, que ha sido galardonado con el premio Best of Innovation en los CES 2020 Innovation Awards, también ha sido nombrado como honoree, premio que reconoce productos en 28 categorías diferentes