La pregunta de los martes: si no hay MotoGP 2020, ¿adiós a Valentino Rossi?

Sigue el efecto dominó que está produciendo el confinamiento obligatorio por el COVID-19. Y uno de los sectores que más está sufriéndolo, dentro del mundo del motor, es la competición. Por eso, nuestra pregunta del martes es: si no hay MotoGP 2020, ¿será el adiós a Valentino Rossi?

Durante los últimos años, al final de cada temporada, todos los aficionados al motociclismo se han cuestionado lo mismo. Incluso como periodista, aun sabiendo que a Valentino no le hacía ninguna gracia, he tenido que preguntarle yo mismo por su posible retirada. Y siempre, adornando la cuestión con toda la sinceridad del mundo: "Vale, cuesta imaginarse un campeonato sin ti. Es más, NO queremos un Mundial sin Rossi. Pero ¿cómo será todo esto?".

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En otra ocasión, poco después de que la familia de las motos se volviera a vestir de luto, le pregunté con la misma honestidad algo que siempre me ha llamado la atención en muchos profesionales de la velocidad y que tuve en su momento la oportunidad de trasladar a otros grandes de lo suyo -los más laureados en su especialidad de la historia como Michael Schumacher (siete veces campeón del Mundo de F1) o Sebastian Loeb (nueve Mundiales de Rally): "Cuándo lo has ganado todo... ¿qué te hace volverte a subir a la máquina?" En otras palabras: ¿de dónde saca uno la motivación para afrontar una nueva temporada, entrenar todos los días, recorrer el planeta, dejar a un lado a familiares y amigos y pilotar una máquina jugándose la vida? 

'Enganchados' a la velocidad

Schumacher respondía antes de su terrible accidente de esquí que "cualquier cosa era mejor que quedarse en casa viendo la tele, como un jubilado"; Loeb confiaba en sus posibilidades de seguir divirtiéndose; hace unas semanas, Carlos Sainz (padre) se sumaba a este particular 'debate' con un "si puedo creo que tengo opciones, volveré al Dakar"...

Y Rossi, (como puedes ver en este vídeo), siempre torcía el gesto un poco de fastidio ante la preguntita y luego, con parapetado en la sonrisa de siempre, lo mezclaba todo un poco: "El gusto para preparar la moto y la emoción para dar en las carreras lo máximo".  

Vídeo: hablamos con Valentino Rossi:

Pero ya no sonríe sin entornar los ojos (y eso se le nota especialmente cuando lo tienes a la distancia social -y ahora, planetaria- de metro y medio). Al menos, desde aquel ya lejano 2015 en el que tuvo en su mano -o mejor dicho, en la bota con la que derribó a Márquez intencionadamente o no- su décima corona... y que no volvería acariciar en estos cinco años. 

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En este 2020, con 41 primaveras cumplidas, se presentaba como la última oportunidad para demostrarse algo a sí mismo, y de paso, al resto del universo, con el equipo Moster Energy Yamaha, puesto que el equipo no le había renovado para 2021, aunque le había prometido una moto igual de competitiva que la de Viñales (25 años) o su sustituto, Fabio Quartararo (21), si quería seguir en la parrilla. Y a 'Vale Yellow', que podría ser el padre de ambos, se seguía sintiendo bien para correr pero alejado de las primeras posiciones, le ardía terriblemente esa decisión. 

Un rival inesperado 

Especulaciones aparte y sin saber exactamente hasta 2019 dónde estaba exactamente Yamaha respecto a las victorias (el dominio de Marc Márquez ha sido tan brutal que ni siquiera está claro tampoco dónde están Honda ni Ducati), las incógnitas en 2020 eran totales.

Pero los hechos son que el mítico 46 amarillo ya no tenía el ritmo para pelear por el podio ni en seco ni en mojado. Y los destellos de genialidad que acompañaban remontadas, adelantamientos o frenadas puntuales, siempre subrayados desde la grada por sus incondicionales, no le han terminado de ilusionar. 

Tras nueve campeonatos del Mundo y más de dos décadas al más alto nivel, al doctor se le acaba definitivamente el tiempo para volver a ganar o, al menos, estar entre los mejores de cada Gran Premio. Y si el coronavirus termina de arruinar las cosas y no hay MotoGP en 2020, ¿será el adiós definitivo de Valentino Rossi? De momento, 'El doctor' busca la vacuna contra su retirada entrenando duro en su rancho de Italia.