Trump quiere borrar el coche eléctrico de la faz de la Tierra
Donald Trump, candidato republicano a las presidenciales de Estados Unidos de noviembre, se ha mostrado en contra del coche eléctrico y las normas que lo favorecen. Trump ha anunciado que acabará con las ayudas a la compra y pondrá fin a los nuevos límites de emisiones de la EPA.
El anuncio ayer de la retirada del presidente de Estados Unidos Joe Biden en la carrera presidencial allana un poco más el camino de Donald Trump hasta la Casa Blanca en la que podría ser su segunda legislatura.
Si bien el magnate aún no ha sido elegido presidente (las elecciones son el 5 de noviembre), Trump se ve victorioso ahora que su rival se ha retirado a pesar de que Kamala Harris, actual vicepresidenta, podría ser la candidata a la presidencia por parte del Partido Demócrata.
Una de las figuras que más apoya la candidatura de Donald Trump es Elon Musk. El multimillonario dueño de empresas como Tesla y SpaceX, aporta más de 45 millones de dólares cada mes a la campaña del Trump, todo ello a pesar de que el candidato republicano no se muestra a favor del coche eléctrico, uno de los principales negocios de Musk.
El candidato republicano a la Casa Blanca, en contra de los coches eléctricos
En un discurso reciente en Milwaukee durante la convención republicana, Trump no dudó en mostrar su oposición a los vehículos eléctricos: “Pondré fin al Mandato de Vehículos Eléctricos el primer día, salvando así a la industria automovilística estadounidense de la destrucción total y ahorrando a los clientes miles de dólares por coche”, afirmaba.
Trump, cuya campaña está en parte financiada por las petroleras, se muestra a favor de los coches de combustión interna, los combustibles fósiles y la extracción de petróleo. Todo esto le ha llevado a posicionarse en contra del automóvil eléctrico, argumentando que las subvenciones a la compra de este tipo de coches es un “increíble despilfarro” de dinero.
Estas ayudas federales están incluidas en la Ley de Reducción de la Inflación del Presidente Biden y permiten a los compradores beneficiarse de una deducción de hasta 7.500 dólares por coche eléctrico en el IRPF ha finales de año, según Motorpasión.
Por si todo esto no fuera suficiente, el candidato del Partido Republicano ha anunciado que se encargará de eliminar las normas que prohíban la venta y circulación de coches con motores de gasolina, diésel e incluso híbridos. También considera que las ayudas a la compra de vehículos eléctricos están beneficiando a China.
El país asiático es el principal fabricante mundial de baterías, controlando la cadena de suministro de materias primas necesarias para su producción. Por lo tanto, el bando republicano considera que otorgando estas ayudas a la compra de vehículos eléctricos, el dinero acaba en manos chinas y, por tanto, se está financiando a China.
A pesar de las afirmaciones de Trump y otros miembros del Partido Republicano, actualmente está vigente una ley con las condiciones para obtener beneficios fiscales en la compra de un coche eléctrico.
Entre las normas figura que estos automóviles “no podrán tener ningún componente de la batería fabricado o ensamblado por entidades extranjeras de interés”, lo que incluye a países como China, Rusia o Corea del Norte. A partir de 2025, estas baterías no podrán contener minerales críticos extraídos, procesados o reciclados en esos países, donde también figura Irán.
Por último, Donald Trump también ha criticado lo que considera la “nueva estafa verde”, en referencia a los nuevos límites de emisiones de CO2 de la EPA para coches nuevos que ha promovido la administración Biden. El candidato republicano, de acabar llegando finalmente a la Casa Blanca, pondría fin a esta normativa.
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