El Toyota GR Yaris más radical: ¡751 CV!

El Toyota GR Yaris se ha convertido en un clásico instantáneo. Su lanzamiento cogió al mundo del motor por sorpresa, transformando al eficiente Toyota Yaris híbrido en una máquina de rallyes homologada para la calle. Sin embargo, hay para quienes no ha sido suficiente y se han visto en la necesidad de radicalizarlo todavía más.

Preparaciones sobre el nipón ya hemos visto unas cuantas, y es que el “pequeño” se presta a este tipo de operaciones, pero sin duda quien se lleva la palma es Powertune, quien ha creado el GR Yaris más radical visto hasta el momento.

Hay que tener en cuenta que la versión de fábrica del modelo ya va bastante apretada, y es que su motor es un sencillo 1.6 turbo tricilíndrico, que ya desarrolla 261 CV y 360 Nm de serie. Se trata de un rendimiento más que notable para un bloque tan pequeño y con una cilindrada tan reducida, pero compara con lo que ha conseguido el preparador parece cosa de niños.

Y es que la compañía, afincada en Australia, ha conseguido extraer del propulsor nada menos que 751 CV de potencia, lo que implica prácticamente triplicar las cifras originales.

¿Cómo han podido conseguir algo así? Llevando a cabo modificaciones extremas sobre el bloque, aunque curiosamente también se han conservado muchas de las piezas originales del mismo.

La novedad más importante es la incorporación de un turbocompresor Garrett G30-770, pero la lista de modificaciones es bastante larga: junta de culata reforzada, un intercooler de mayor tamaño, sistema de escape Akrapovic, un colector de escape hecho a medida, nueva ECU Motec, nuevos inyectores y bomba de combustible…

Llama la atención que, a pesar del notorio aumento de rendimiento, ciertos componentes como los pistones, el cigüeñal o las bielas, son completamente de serie.

Siguiendo con los elementos que se han cambiado, hay que señalar la caja de cambios. La de serie es una manual de seis velocidades, pero Powertune ha instalado una secuencial X-Shift con la que debería ser más sencillo gestionar toda la potencia y mandarla a las cuatro ruedas.

El preparador afirma haber llevado a cabo pruebas con varios motores de manera previa, realizando cambios hasta llegar a la configuración del actual, que consideran que es perfecto. Tras testearlo en rodillos durante bastantes kilómetros, aseguran que es fiable y que durará, pero eso solo lo dirá el tiempo y el uso regular en carretera abierta.

Lo que nos queda por saber, y es algo que despierta curiosidad, es cuáles son sus prestaciones, que deben ser de infarto. El coche solo pesa 1.280 kilos, por lo que su aceleración de 0 a 100 km/h debería ser fulgurante.