Tesla vuelve a tener un trimestre de récord

Elon Musk debe estar contento: Tesla va, como quien dice, “como un tiro”. Acaba de registrar el mejor trimestre de su historia, tanto en lo que se refiere a entrega de vehículos como en beneficios.

De enero a marzo la compañía estadounidense entregó 310.000 vehículos, lo que tiene bastante mérito si se tiene en cuenta que a pesar de la alta demanda, los problemas de suministro de componentes no han permitido que la maquinaria opere al 100%. 

“Nuestras propias fábricas han estado funcionando por debajo de su capacidad durante varios trimestres, ya que la cadena de suministro se convirtió en el principal factor limitante, lo que probablemente continúe durante el resto de 2022”, ha confirmado Tesla.

Eso no ha sido óbice para conseguir el mayor beneficio registrado por la compañía en un trimestre: 3.300 millones de dólares, lo que supone un aumento del 30% respecto a los 2.900 millones registrados en el último trimestre de 2021, que ostentaba el récord de la empresa.

De hecho, durante este periodo los ingresos totales de la firma fueron de 18.800 millones de dólares, lo que implica un aumento del 81% respecto al mismo periodo en 2021.

Todo esto, como es lógico, ha tenido un impacto muy positivo en el valor de sus acciones, que ha aumentado un 4% en los últimos días.

Parte del aumento de los ingresos se debe a que la marca ha encarecido sus coches, algo respecto a lo que Elon Musk se ha pronunciado: "Puede parecer que tal vez no estamos siendo razonables al aumentar los precios de nuestros vehículos dado que tuvimos una rentabilidad récord este trimestre, pero la lista de espera para nuestros coches es bastante larga".

“Y para algunos de los vehículos que la gente pedirá, la lista de espera se extiende hasta el próximo año. Por lo tanto, los precios de los vehículos pedidos ahora realmente anticipan el crecimiento de los costos de proveedores y logística de los que somos conscientes y creemos que ocurrirán en los próximos seis a 12 meses”, apunta.

Y concluye diciendo que “queremos absolutamente hacer que los vehículos eléctricos sean lo más asequibles posible. Ha sido muy difícil con la inflación en un máximo de 40 o 50 años. Los proveedores están bajo una fuerte presión de costes. En algunos casos, vemos que los proveedores solicitan un aumento de costes del 20 % al 30 % desde finales del año pasado”.

Fuente: Driving