Renault celebra los 60 años del 4L con una versión eléctrica para carsharing

Junto con el Seat 600, el Renault 4L permitió que la sociedad española pudiera contar con un medio de transporte con el que desplazarse con libertad. El derecho a la movilidad y al desplazamiento se materializaban con este tipo de modelos, que con un precio asequible se acercaban a las familias medias de la época. Para celebrar los 60 años del Renault 4L la marca lanza una versión eléctrica que podrá ser conducida por Madrid, pues se suma a una flota de carsharing.

El 4L es un coche único. Renault lo ha creado para celebrar seis décadas desde la construcción de este icono. Llegó al mercado nada menos que en 1961, cuatro años después que el Seat 600, y consiguió hacerse un hueco en el mercado del automóvil de entonces. Con la idea no solo de celebrar este cumpleaños, también de apoyar la movilidad compartida, la marca se une a la compañía Zity by Mobilize, perteneciente al grupo Renault, y pone a disposición de los usuarios este 4L eléctrico.

En realidad, no parece que vaya a poder conducirse de forma libremente. Pese a entrar a formar parte de la flota de coches compartidos, circulará por las calles de Madrid en noviembre para la grabación de un spot publicitario. Y probablemente se quedará en eso, pese a que sería muy interesante unir el pasado con el presente de esta forma. Un coche que monta ahora un motor eléctrico donde ha habido todos estos años un motor de gasolina. 

Se llegaron a vender 800.000 unidades solo en nuestro país del Renault 4L. En total, más de 8 millones en el mundo. La marca confiaba en motores de cilindrada entre 0.7 y 0.8 litros, con una potencia máxima de entre 22 y 30 CV. No tenemos datos de la potencia del motor eléctrico que han instalado ni del rango de autonomía, pero no serán comparables con las cifras que se manejaban entonces.