Prueba del DFSK Glory 580. Un SUV chino muy convincente

El fabricante de camiones más grande de Asia, Dongfeng, nos trae su primer SUV: el DFSK Glory 580. Un siete plazas en el formato del Skoda Kodiaq que quiere brillar con las cualidades habituales de este tipo de coches, más un as en la manga: un excelente equipamiento a un precio de derribo de poco más de 20.000 euros. Comprobamos cómo se comporta en esta prueba del DFSK Glory 580.

Cuando observamos DFSK en el garaje de AUTO BILD junto a un Volkswagen Tiguan y un Hyundai Tucson, lo cierto es que no desentona, y pasa la inspección visual sin ningún defecto. Sobrio, discreto. Con sus ojos LED inclinados y tubos de escape cuadrados, no parece un modelo barato. 

El interior también sorprende con algunos elementos que nos son familiares: una fila de botones como los de Mercedes, el monitor con aspecto de BMW, un ajuste del espejo como el de Toyota. Todo está montado de manera bastante sólida, solo algunas partes mal desbarbadas podrían procesarse mejor. 

En el Glory, la decoración de madera en el cockpit y el cuero artificial brillan en los asientos de forma adecuada, que no solo ofrecen mucho espacio, sino también un mecanismo variable: la segunda fila, dividida y desplazable longitudinalmente, facilita la entrada al fondo. Los niños también se sientan allí increíblemente espaciosos, y eso es algo que conquistará a muchos padres. 

Si no necesitas esta tercera fila, tendrás un maletero interminable que no solo se traga el equipaje de vacaciones de un gran familia, sino que también te apaña una mudanza.

Y en marcha…

El motor de gasolina turbo (de Mitsubishi) se siente rezongón con sus 145 CV, también porque la transmisión automática de variador continuo (de Honda) consume mucha potencia. Cuando pisas el acelerador, no hay empuje al principio, y luego llega toda la furza de golpe.

A 5.200 inserta la transmisión programada, y la velocidad está limitada a 180 km/h. La falta de coordinación también explica los 9,9 litros de consumo de la prueba. Lo mejor que puede hacer es dejar que el DFSK ruede sin prisa, porque la carrocería se balancea rápidamente en curvas. Pero no creas que llega a ser inseguro, porque el ESP y los frenos tienen todo bajo control, a pesar de una dirección lenta de reacciones.

El sistema de navegación muestra que los chinos estén empezando: solo aparecen caracteres chinos en la pantalla de nuestra unidad de pruebas, pero los occidentales deberían estar listos pronto. El amplio equipamiento con techo panorámico de serie, el asiento del conductor ajustable eléctricamente y la entrada sin llave son convincentes a la hora de sopesar esta compra. 

En cuanto a los últimos avances (airbags de cabeza, radio digital, luces dinámicas en las curvas) puedes prescindir fácilmente de ellos si buscas un coche bien construido, práctico e e inmejorablemente barato, lo que garantiza una muy baja depreciación. 

Conclusión 

Dongfeng ofrece el Dacia entre los SUV grandes: mucho automóvil por poco dinero. Técnicamente sólido, lento pero seguro, eso es suficiente para los compradores de presupuesto bajo que quieren hacer muchos kilómetros en familia.