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El Porsche 911 E-RWB esconde el motor eléctrico de 570 CV de un Tesla

Porsche 911 E-RWB
¿Sacrilegio?

Es posible que la mitad de nuestra audiencia se lleva las manos a la cabeza: ¿Un Porsche 911 eléctrico? Peor, aún: ¿un 911 clásico eléctrico? ¿Y encima hecho por un especialista consagrado como es Rauh-Welt Begriff (RWB)? Pues sí, y aunque a muchos les duela, lo cierto es que va a haber que acostumbrarse a este tipo de preparaciones puesto que aunque el Porsche 911 E-RWB sea el primer ‘nueveonce’ con un ‘swap’ de motor perteneciente a un Tesla, no dudamos de que le seguirán otros más o al menos de un corte similar.

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Desde fuera es difícil adivinar su naturaleza de cero emisiones más allá de por la ausencia de un sistema de escape, puesto que cuenta con los añadidos habituales en el preparador: kit de carrocería Backdate, conversión ‘Long Hood’, pintura en color ‘Ivory Paint’ como la que utilizaba Porsche en 1957 y variados detalles cromados entre los que se encuentran las llantas BBS de 17 pulgadas, que van envueltas en neumáticos Toyo Tires R888R de 245/40 R17 en el eje delantero y 315/35 R17 en el trasero.

También su habitáculo sigue la línea de otras obras de RWB, con asientos a medida tapizados en Burberry, volante clásico Momo con aro de madera, paneles de fibra de vidrio y una jaula antivuelco completamente cromada.

Pero es al mirar su motor cuando el Porsche 911 E-RWB desvela su sorpresa: tiene la mecánica de un Tesla Model S, un bloque eléctrico de 420 kW (570 CV) de potencia alimentado por una batería de 32 kWh con refrigeración líquida. Según RWB esto hace que sea más rápido que un deportivo de combustión de 700 CV.

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