Lleva tiempo rumoreándose, pero parece que la llegada de un hipotético ‘Baby G’ está más cerca que nunca. Mercedes estaría ya inmersa en el desarrollo de una versión a escala de su aclamado Mercedes Clase G, que llegaría al mercado en 2026 y lo haría en forma tanto de coche térmico como de eléctrico.

Las nuevas noticias llegan desde Handelsblatt, desde donde apuntan que el nuevo miembro de la familia de cero emisiones de la marca alemana (cuyo nombre todavía se desconoce, aunque podría ser GLG según la nomenclatura actual) conviviría en la gama con su hermano mayor.

Aparentemente se trataría literalmente de un mini Clase G, trasladando el formato del todoterreno a unas dimensiones más compactas, pero manteniendo su diseño rudo y bastante “cuadrado”. Además, la idea también es conservar las características capacidades off-road que tiene el G original.

Donde debería presentar más novedades es a nivel de diseño interior, puesto que por fechas, ya debería lucir la nueva evolución de los habitáculos de la compañía, para la que se espera todavía una mayor presencia de pantallas.

Tendrá como base la plataforma Mercedes Modular Architecture (MMA), que llegará en 2024 y que emplearán también otros modelos de acceso de la firma, como serán los próximos Mercedes CLA, GLA y GLB.

Contará con una arquitectura eléctrica de 800 voltios, por lo que podrá soportar versiones tanto térmicas como completamente eléctricas, algo que parece que hará. No hay datos técnicos de ninguna de ellas, pero según los rumores la variante a pilas será capaz de superar los 500 kilómetros de autonomía.  

Llama la atención, eso sí, el movimiento, puesto que desde la compañía se ha señalado que tienen como objetivo reducir el número de modelos de acceso de su gama para centrarse en los segmentos más lujosos del mercado, y la llegada del Mercedes Baby G apunta en la dirección opuesta.