Mercedes Clase B híbrido enchufable, cinco virtudes y dos defectos

Aunque los SUV se han comido, literalmente, el segmento de los monovolúmenes, todavía se pueden encontrar modelos interesantes de esta categoría, perfecto para viajar en familia. Un ejemplo es el Mercedes Clase B híbrido enchufable. Aquí van cinco virtudes y dos defectos.

La tercera generación del Mercedes Clase B incluye, por primera vez, una variante híbrida enchufable, denominada B 250 e. Equipa un sistema de propulsión compuesto por un motor de gasolina de 160 CV y otro eléctrico para producir una potencia conjunta de 218 CV. 

Es un monovolumen que tiene como principal rival el BMW 225xe iPerformance Active Tourer. 

Autonomía eléctrica

La primera de las virtudes que queremos destacar es su autonomía eléctrica. Cuenta con una batería de 15,6 kWh ubicada bajo la banqueta trasera, que le proporciona una autonomía que oscila entre los 61 y 70 kilómetros, dependiendo del equipamiento.

Es una cifra homologada siguiendo los criterios del ciclo WLTP y, aunque en conducción real no sea tan alta, sigue estando por encima de la media y es superior a la que declara el 225xe iPerformance Active Tourer (entre 42 y 49 kilómetros).

Equipamiento tecnológico avanzado

En segundo lugar, el monovolumen híbrido enchufable de Mercedes-Benz incluye un avanzado equipamiento tecnológico. Destaca la vista del salpicadero, gobernado por las dos pantallas digitales, que pueden ser de 7 o 10,25 pulgadas, según el equipamiento escogido. 

Una pantalla es para la instrumentación y es configurable, mientras que la central engloba el manejo del sistema multimedia y todas las funciones del vehículo a través del sistema multimedia MBUX. Opcionalmente, puede equipa el reconocimiento de voz, cuyo funcionamiento es exquisito.

Facilidad de conducción

Por otra parte, cabe destacar también lo sencillo que resulta conducir el Mercedes Clase B híbrido enchufable, gracias, sobre todo, a su buena visibilidad y a una dirección ligera, que requiere poco esfuerzo por parte del conductor para maniobrar. 

Además, es un vehículo que ofrece una buena calidad de rodadura y está bien insonorizado, por lo que es ideal para realizar largas rutas en familia.

Habitabilidad

Como buen monovolumen, el Clase B 250 e ofrece unas buenas cotas de habitabilidad, especialmente en las plazas traseras, aunque no ofrece tres asientos individuales. La banqueta trasera es fija de serie, aunque el espacio para cabeza y piernas es bueno. 

Opcionalmente, la marca alemana ofrece una banqueta deslizable, para aumentar la capacidad del maletero o la habitabilidad, según las necesidades del momento. 

Otra característica del interior es el puesto de conducción elevado, aunque la distancia libre al suelo es la misma que en un Clase A.

Asistencias a la conducción

Por último, el Clase B híbrido enchufable presume también de un gran equipamiento e materia de seguridad, con un amplio catálogo de asistencias a la conducción. De serie, ofrece el servofreno de emergencia en ciudad con detección de peatones y ciclistas, el detector de vehículos en ángulo muerto y el aviso por cambio involuntario de carril. 

Opcionalmente, el equipamiento se puede completar con muchos elementos, entre ellos, el sistema Distronic, que incluye asistente activo de dirección, combinado con el programador de velocidad activo y el asistente de mantenimiento de carril. De esta manera, mantiene el coche centrado en el carril y controla la distancia con el coche que circula delante, automáticamente. 

Defecto 1: precio

Conducir un coche con la estrella en el morro tiene un coste. Y en el caso del Clase B 250 e, el precio arranca en 43.675 euros. Es 4.500 euros más caro que el B 200 de gasolina con 163 CV y cambio automático 7G-DCT. 

Es también unos mil euros más caro que la versión diésel de 190 CV y un poco más barato que el BMW 225xe Active Tourer, pero éste cuenta con tracción total. Además, existen otras alternativas más baratas, como el Volkswagen Golf Sportsvan.

Defecto 2: calidad de algunos acabados

El segundo defecto que queremos señalar es la impresión que transmiten algunos materiales del interior. Si bien, el aspecto es llamativo y moderno, por la presencia de las pantallas digitales, la sensación de calidad percibida no es muy elevada.

Hay muchos plásticos con acabado negro piano que se ensucian y rayan con facilidad. Además, algunas piezas tienen un tacto poco sólido, como los mandos de la climatización. Algo que chirría en un vehículo de este precio.