El espectacular primer coche eléctrico de Bentley

En desarrollo bajo el proyecto Artemis de Audi, el espectacular primer coche eléctrico de Bentley se espera para la segunda mitad de esta década y, como toca, deberá marcar cotas máximas dentro del grupo en lo que se refiere a lujo y prestaciones. Eso sí, aunque poco se sabe de cómo se concretará, se van conociendo detalles poco a poco.

En una entrevista reciente con Autocar, el presidente de Bentley, Adrian Hallmarck reconocía incluso que todavía no saben si el primer eléctrico de Bentley y los que llegarán después inaugurarán un nuevo linaje dentro de la firma o utilizarán denominaciones ya existentes. Lo que sí está claro es que emplearán alguna de la plataformas eléctricas que desarrolle el Grupo Volkswagen.

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Y es que en Bentley, creen que su primer eléctrico deberá asentarse sobre un patón de baterías, pero no deberá ser un SUV. Así, será algo parecido en su estructura al Jaguar i-Pace a menos que la tecnología avance más de lo esperado en los próximos dos o tres años, el tiempo en el que este proyecto deberá estar listo para su fase de industrialización. 

“Además de pasar a la electricidad, adaptaremos nuestra gama de productos porque el mundo está cambiando. Queremos atraer a más mujeres y ser más relevantes en los entornos urbanos del futuro que son muy diferentes a los de hoy, y queremos apelar a los valores del lujo moderno que son diferentes a los de hace 20 años", admitía Hallmarck en la mencionada entrevista. 

El ejecutivo proseguía: "los tiempos volverán a cambiar en los próximos 10 a 15 años. El formato, el tamaño y el nombre de nuestro producto deben ajustarse al carácter y la estrategia del producto en función de los clientes y hacia dónde vemos que van esos segmentos. Amamos nuestros nombres actuales. Quizás continúen. Pero siempre seguiremos a los clientes, los segmentos y los valores y buscaremos un nombre que se ajuste". 

Así será el primer Bentley eléctrico 

Bentley estima necesario que su primer coche eléctrico equipe unas baterías de entre 110 y 120 kWh, que deberán estar disponibles para 2025 y ofrecer al modelo una autonomía de entre 400 y 500 km. Es lo que necesita una gran berlina de casi 2.000 kg para hacer esa distancia y, si se tratara de un SUV, le harán falta al menos 150 kWh.

Así, ya se puede inferir que el primer eléctrico de Bentley será algo así como un Continental Flying Spur. Eso sí, su diseño no deberá ser tan parecido, aunque es difícil saberlo porque según el CEO de la firma, todavía este proyecto está al 20%, eso que ahora llamarían fase semilla si no fuera porque está en manos de una marca de coches centenaria. De ahí que pueda asegurarse que el primer Bentley eléctrico.