La DGT mantiene su intención de eliminar el margen de 20 km/h al adelantar en carreteras secundarias

Parece que no está todo dicho acerca de la polémica medida de la DGT para eliminar el margen de 20 km/h para adelantar en carreteras secundarias. A pesar de no contar con apoyos, Tráfico seguirá peleando para que la medida forme parte de la nueva Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos y Seguridad Vial.

En la orden del día del Senado del pasado lunes estaba la revisión y aprobación del proyecto para modificar la Ley de Tráfico. El texto a debatir era el aprobado en el Congreso con las enmiendas que los diferentes partidos hicieron a la primera propuesta de la Dirección General de Tráfico (DGT). 

Una de las medidas propuestas por Tráfico que más reacciones ha provocado ha sido la de eliminar los 20 km/h de margen que, a día de hoy, se permiten cuando se trata de adelantar en carreteras convencionales. Para Pere Navarro, director general de Tráfico, esta concesión supone un peligro, especialmente en vías secundarias que son las que acumulan el mayor número de siniestros y lo más graves.

Mantener abierto el debate

Para la oposición y expertos, no permitir superar en 20 km/h el límite máximo de la vía tendrá el efecto opuesto ya que supone aumentar el tiempo que el vehículo que adelanta pasa en el carril contrario.

Por estudios como el que aparece en el enlace, en el Congreso se decidió eliminar del proyecto de ley el artículo que eliminaba el margen. El dictamen no ha incorporado la enmienda del grupo socialista que elimina la posibilidad actual de rebasar en 20 kilómetros por hora el límite de velocidad en carreteras convencionales en los adelantamientos a otros vehículos, pero han pedido que vuelva a ser debatido en el Pleno.

"No compartimos que se elimine ese margen de 20 kilómetros en adelantamientos, sobre todo en las carreteras convenciones donde hay más siniestralidad y puede provocar a veces situaciones mucho más peligrosas en lugar de aumentar la seguridad", ha dicho José Julián Gregorio, senador del PP.

"Desgraciadamente, esto nos hace pensar que es otra idea no tan peregrina de nuestro querido Gobierno y la DGT para seguir con ese afán recaudatorio", apunta.

Como representante de los socialistas, Raúl Fernández, ha negado que tras la medida haya un afán recaudatorio y ha añadido que el objetivo de la misma, como de la reforma, es "intentar alcanzar ese horizonte de reducción de las muertes y de la siniestralidad vial a la mitad cuando acabe esta década".