Descubren cómo incrementar la vida útil de las baterías de los coches eléctricos, y es más sencillo de lo que parece
Claudia Pacheco
El conductor puede recuperar la capacidad de la batería con cada ciclo de carga.
Una investigación ha analizado cuánto duran las baterías eléctricas de más de 15.000 conductores de coches y ha concluido que apenas el 8% la han cambiado después de 10 años. Estas cifras son positivas incluso teniendo en cuenta la producción de baterías defectuosas de LG Chem en modelos como el Chevrolet Volt o el Hyundai Kona.
Las baterías de iones de litio actuales destacan por su fiabilidad. Solo el 1,5% de los conductores las han reemplazado desde que compraron su coche eléctrico. En la mayoría de los casos, ni siquiera ha habido una avería, sino que la degradación de los materiales ha provocado que la autonomía de la batería sea cada vez menor.
Un estudio de la Universidad de Stanford parece haber dado con la clave para comprender qué factores favorecen la degradación de las baterías de iones de litio. Este componente es uno de los más costosos del vehículo, así que es más importante que nunca comprender cómo mejorar su ciclo de vida.
El conductor puede gestionar la capacidad de la batería con cada ciclo de carga
Las baterías de litio podrían duplicar la autonomía actual en la próxima generación, pero se enfrentan a un problema con difícil solución: la capacidad para almacenar energía disminuye después de los primeros ciclos de carga. Esto puede ser un problema para los conductores que esperan que su vehículo les dure unos cuantos años en perfectas condiciones.
La solución puede pasar por cambiar los metales que se integran en las baterías, aunque la tecnología de las baterías actuales está tan avanzada que sería complejo desarrollar un proyecto que pueda competir en precios en los próximos años. La investigación ha concluido que la opción más realista es optimizar los ciclos de carga.
Un truco que puede aumentar la autonomía a largo plazo es agotar la carga de la batería y dejarla reposar durante unas horas, para, posteriormente, cargarla, como es habitual. Esta práctica permite que el componente recupere la capacidad perdida, lo que aumentará su ciclo de vida.
Estas mejoras se podrán integrar por defecto reprogramando el software de las baterías, ahorrando considerablemente en costes de reparación y diseño de nuevos modelos más eficientes. La finalidad es que los coches eléctricos del futuro sean tan eficientes que se conviertan en la opción preferida por los conductores en los próximos años, ha expresado Yi Cui, autor principal del estudio.
Etiquetas: batería
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