Así acelera el Jeep Grand Cherokee Trackhawk
Hace unos años alguien tuvo la idea de coger el motor Hellcat V8 que montan varios muscle cars de Dodge e instalárselo a un Jeep. Esto, que en principio parecía una auténtica locura, ha acabado materializándose en 2017 en el Jeep Grand Cherokee Trackhawk, una mala bestia que es mitad todoterreno mitad máquina de ganar carreras de aceleración. Además, con un precio de casi 100.000 dólares, es el Jeep más caro de la historia. En The Fast Lane Car se han preguntado qué motivos tiene para ser tan caro, y han encontrado suficientes argumentos para defender su precio.
VÍDEO: 5 SUV que suenan como un deportivo
El primero ya lo hemos comentado: su motor. Y es que bajo el capó monta un masivo bloque 6.2 Hellcat V8 sobrealimentado que entrega nada más y nada menos que 707 CV. Esto, sumado a una caja de cambios Torqueflite de ocho relaciones y a un sistema de tracción integral, hace que sea condenadamente rápido.
Y eso nos lleva al punto número dos: su aceleración. A pesar de su tamaño es capaz de acelerar de 0 a 60 millas por hora (equivalente al 0-96 km/h) en 3,5 segundos, algo en lo que influye su función de ‘Launch Control’ y a que la transmisión ha sido reajustada para tardar solo 160 milisegundos en hacer los cambios de marcha. En la misma está el tercero: su tiempo en el cuarto de milla. En Estados Unidos este dato es sagrado, y el Jeep Grand Cherokee Trackhawk saca buena nota al completarlo en 11,6 segundos, cruzando la meta a 186 km/h.
El cuarto aspecto se encuentra en las ruedas, concretamente en los frenos. Esta variante monta en exclusiva unos Brembo con pinzas amarillas de seis pistones que lo clavan de 96 km/h a cero en 35 metros. Por último, su capacidad de remolque, que le permite arrastrar casi 3.300 kilos.
Fuente: TFLC.
Descubre más sobre Mario Herráez, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.