Las 5 cosas que debes saber para conducir con un remolque
Conducir con un remolque a cuestas es toda una experiencia. Todos los que lo hayáis hecho sabréis de lo que hablo. Por ello, no está de más que nos den una serie de consejos para ello, además de saber todo lo que es necesario para poder hacerlo de forma legal. Por ello escribimos este artículo, en el que recopilamos toda la información que creemos necesaria. Es la siguiente:
1. ¿Qué carnet tengo que tener para conducir con un remolque?
El tipo de remolque que queramos utilizar es el que determinará el carnet de conducir que necesitemos. Para los que pesan menos de 750 kilogramos, el 'B' habitual es suficiente. El carnet 'B96' es el que se nos exige para los vehículos de menos de 3.500 kilogramos y un remolque de hasta 750 con un rango total de 4.250. En el caso de los vehículos de menos de 3.500 kg que tiren de remolques de más de 750 con un total de entre 4.250 y 7.000 kg, hay que tener el permiso B+E, mientras que los que transporten un conjunto superior a todo esto tendrán que tener en vigor el carnet de camión C+E.
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2. ¿Qué pasa con el seguro y con la ITV?
Otra de las principales dudas que nos asaltan a conducir con un remolque tiene que ver con el seguro del mismo. Pues bien, si éste pesa menos de 750 kilogramos, quedará cubierto por la propia póliza del coche. En el caso contrario, tendremos que avisar a la compañía que tengamos para hacerle un seguro aparte.
También genera dudas la ITV para los remolques, que solamente la tendrán que pasar los que lleven su propio seguro y matrícula. Durante los seis primeros años de vida, deben pasar una revisión cada dos años, para después hacerlo de forma anual hasta que cumplan diez. Después deben pasar revisión cada seis meses.
3. Cómo debo cargar mi remolque
Cargar bien el remolque es una de las cosas más importantes que existen de cara a la seguridad. Lo primero que has de tener en cuenta es que no hay que poner demasiada carga en el maletero para evitar que la zaga del vehículo descienda demasiado, descuadrando el centro de gravedad del conjunto. También has de procurar una distribución lo más homogénea posible dentro del remolque, sujetando la carga en la medida de lo posible para evitar movimientos que nos desestabilicen.
4. La práctica es fundamental
Conducir con un remolque cambia totalmente todo, de tal manera que no está de más que emplees varios días en practicar en alguna zona donde no molestes a nadie, como por ejemplo un parking sin mucha ocupación o cualquier explanada. Sobre todo te encontrarás dificultades a la hora de maniobrar, y es que hay que tener en cuenta que el remolque reaccionará justo al contrario de lo que lo hace el coche cuando damos marcha atrás. Aparcar puede ser un drama si no tenemos las nociones básicas. Además, debes acostumbrarte a controlar la anchura del conjunto y tener cuidado en giros muy cerrados, donde el propio remolque puede golpearnos.
Una vez en marcha también tienes que tener en cuenta el extra de peso que llevas detrás de ti, con lo que cualquier maniobra requiere más anticipación de lo normal. Es también especialmente importante que mantengas más distancia de seguridad de la habitual, ya que el espacio necesario para frenar aumenta.
5. ¿Qué límites de velocidad tengo que cumplir?
Los límites de velocidad a cumplir cuando te toca conducir con un remolque son también diferentes a los habituales. Por ejemplo, en autopistas o autovías no se pueden superar los 90 km/h en el caso de los remolques ligeros, bajando esta cifra a 80 km/h en el caso de los pesados. En carreteras convencionales con arcén pavimentado de metro y medio o más, el límite para todos los remolques es de 80 km/h, mientras que en el resto de vías fuera de poblado no podremos pasar de 70 km/h.
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