Por qué los motores pierden potencia con el paso del tiempo

¿Sabes que los motores pierden potencia con el paso del tiempo? ¿Y conoces las razones? A grandes rasgos podríamos decir que en los coches impulsados por un motor de combustión hay multitud de componentes que tienen su papel en esa entrega de potencia: cada uno de ellos necesita su correspondiente mantenimiento, pero por mucho que los cuidamos su vida útil está limitada. Vamos a entrar en detalle para analizar todas esas razones.

¿Está muerto el motor de combustión?

Los componentes del motor

Empezamos en el epicentro de la cuestión: el motor. Está formado por muchísimas piezas que, lubricadas por el aceite, se mueven a mucha velocidad para poner en marcha tu coche. El problema es que por muy cuidadosos que seamos con su mantenimiento, no podemos detener su desgaste. Con el paso del tiempo se deteriorarán los árboles de levas, los pistones o los cilindros, entre otros, mermando la potencia del bloque. 

Filtro de aire

Es el encargado de que las impurezas no entren en la admisión. Si la suciedad se acumula en él puede obstruirlo: al motor no le llegará la cantidad necesaria de oxígeno para quemar el combustible. El coche consumirá más y tendrá menos potencia, algo que notaremos con el paso del tiempo puesto que es una pérdida progresiva.

Filtro de combustible

Su misión es parecida: impide que las impurezas del combustible lleguen al motor. Si está taponado se convertirá en un cuello de botella y experimentaremos pérdidas de potencia, sobre todo cuando pidamos fuerza al motor.

Caudalímetro

Mide el flujo de aire que llega al motor así que si no cumple con su deber, notaremos que el coche rinde menos. Al trabajar de la mano de la centralita, el problema será detectado inmediatamente por la unidad de control del motor.

Inyectores

Introducen el combustible en el motor y con el tiempo, mucho tiempo, pueden estropearse. Los fallos en este componente también pueden estar provocados por la obstrucción o por un combustible con más impurezas de lo habitual o que haya sido mezclado con agua. Asimismo pueden perder estanqueidad inyectando combustible cuando no estemos acelerando.

¿Se ha pinchado la burbuja del downsizing? 

Bomba de combustible 

En el caso de las que son de baja presión su desgaste reducirá la potencia del motor. Un deterioro causado por el paso del tiempo o por circular con poco combustible durante demasiado tiempo. En esta situación no podrá suministrar la cantidad adecuada de combustible o lo hará irregularmente.

Turbo 

Lo cierto es que esta es una pieza que puede durar toda la vida si está bien cuidada. En caso contrario puede perder su hermetismo, consumir aceite a través del carrete o perder su presión máxima de soplado. En cualquiera de estos escenarios tu motor estará perdiendo potencia.

Bujías

Este problema sólo se presenta en los coches de gasolina: para arrancarlos se necesita una chispa que encenderá la mezcla de aire y combustible… y esa chispa procede de las bujías. El tiempo hace mella en ellas provocando que pierda intensidad o, incluso, que desaparezca. Ten en cuenta, además, que una bujía en mal estado puede crear carbonilla en las cámaras de combustión.

Si lo que falla es la bobina lo notarás rápidamente puesto que es un componente que sólo admite dos posibilidades: funcionar o no hacerlo. En el caso de los modelos más antiguos, las bujías están conectada a un cable que va a la tapa del distribuidor de corriente: si esta se desgasta, la electricidad no llegará.

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Catalizador

Una vez más el tiempo juega en su contra ya que pueden taponarse o, directamente, romperse. Si el catalizador no funciona correctamente, los gases de escape no circulan como deben y el motor pierde fuerza.

Filtro de partículas y EGR

Los coches diésel cuentan con dos elementos diferenciadores. El primero de ellos es la válvula de recirculación de gases de escape (EGR) que puede obstruirse mermando la potencia del vehículo. El segundo es el filtro de partículas que presenta el mismo problema: cuando está muy sucio no cumple su función y provoca pérdidas de fuerza.