Comparativa: Audi RS 5 vs Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio

Potencia a raudales: el Audi RS 5 y el Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio en un duelo sobre el circuito de Goodyear en Mireval. Esto va sobre el tiempo más rápido y el motor con más capacidad para sorprender. ¿Cuál se llevará el gato al agua? Comparativa: Audi RS 5 vs Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio.

Para empezar, hay que decir que estos dos rivales no tienen mucho en común. Los dos toman su fuerza de sendos V6 biturbo de 2,9 litros. Pero en el resto, son muy diferentes. Pero la pregunta que nos hacemos es: ¿Qué carácter pega más con el circuito? ¿El fogoso italiano o el perfeccionista alemán? El Audi llega con el paquete dinámico RS que incluye diferencial deportivo y Dynamic Ride Control. También lleva el techo en carbono opcional, para rebajar algo el peso y lograr un mejor punto de gravedad. Hay más extras en esta unidad de pruebas, como los frenos cerámicos.

¡A la pista!

Nada más arrancar, el sonido del motor del Audi (450 CV, 600 Nm) impone con su presencia absoluta, tanto como para no echar de menos el V8 de su antecesor. El efecto "sobre raíles" de su tracción quattro aporta un plus de confianza. Pero el mejor apoyo a su colosal mecánica es la precisa dirección. Tan directa que no te dejará pensar dos veces hacia dónde apuntar el morro a la salida de las curvas.

El Coupé ahorra 100 kilos respecto al modelo anterio, si bien su reparto de masas sigue cargando sobre el eje delantero, lo que implica una tendencia al deslizamiento de esas ruedas. Pero tras algunas pruebas con el radio de dirección, es fácil cogerle el punto y evitar sorpresas desagradables.

VÍDEO: Así suena el Audi RS 5

Un variador automático más suave sustituye al doble embrague, y por eso responde con un leve retardo cuando le das a la leva derecha para subir a la siguiente marcha, lo que es una rémora de cara al crono. Una zaga nerviosa al frenar a fondo al final de las rectas también le cuesta tiempo, porque obliga a corregir. No es un drama, porque las reacciones del coche son anticipables y la precisión y agarre dan mucho margen, lo suficiente para lograr un tiempo notable de solo 1:36,60 minutos.

Le llega el turno al Alfa...

Aquí tenemos 60 CV más y 50 kilos menos, y la potencia solo se proyecta al eje posterior, conectado al motor por una transmisión cardán de fibra de carbono. Para lograr un centro de gravedad más bajo, el techo y el capó son de ese mismo material, en este caso, de serie. Pero los excepcionales baquets Sparco sí son opcionales, como los caros frenos cerámicos de Brembo. El V6 del Alfa (510 CV y 600 Nm) suena más auténtico, más mecánico, sin artificios.

Con los frenos calientes, las detenciones del Alfa con un poco más contundentes que las de su rival, pero el punto de presión es más blando y no es tan dosificable como en el Audi. El Alfa sale catapultado de cada curva, y al entrar, en cada giro, la zaga trabaja a la par. En modo Race, el ESP pasa a un segundo plano, y el eje trasero permite leves deslizamientos controlados para recalcar las curvas y colocar el coche siempre en la posición idónea ante la siguiente recta.

En definitiva, el Alfa no solo se siente más veloz, sino que también lo es: 1:36,07 minutos ha marcado el crono en su vuelta más rápido. En circuito, el Italiano le gana la partida al alemán.

Y ya que has llegado hasta aquí... ¿Quieres sabes cuál es tu coche ideal?