Prueba Mercedes Clase C Cabrio 2016: el hermano molón

Parece que el fabricante alemán se ha propuesto satisfacer los caprichos o necesidades del cualquier comprador que se sienta atraído por un Clase C. Las diferentes versiones que ha lanzado de él (berlina, coupé, familiar...) son la mejor prueba de ello. Y, es que aunque los cabrios no son precisamente el segmento con mayor éxito comercial en España (Mercedes únicamente espera vender 250 unidades del C Cabrio el primer año), la marca de la estrella ha decidido lanzar la versión descapotable de este modelo. AUTO BILD ya ha tenido la oportunidad de probar el Mercedes Clase C Cabrio 2016 por las carreteras de Trieste (Italia) y Eslovenia.

El Mercedes Clase C Cabrio 2016 está basado en su hermano Coupé -algo que salta a la vista-, y estéticamente resulta muy atractivo tanto capotado como descapotado. Como puedes ver en la galería de imágenes, apuesta por un techo de lona en vez de uno duro. En este aspecto, y como suele decirse, “para gustos, los colores”... Eso sí, estoy seguro que los más puristas lo agradecerán. Esta capota blanda, que estará disponible en varios colores -tanto en su parte exterior e interior-, cuenta opcionalmente con una versión insonorizada multicapa que, según la marca, incrementa aún más el aislamiento acústico.

Para compensar la pérdida de rigidez del coche con respecto a la versión normal, el Clase C descapotable ha adoptado las estructuras de la carrocería en la sección delantera y en el piso “a las exigencias de un descapotable”. Además ha incorporado un sistema específico de protección que, si detecta peligro de vuelco, crea un espacio de supervivencia junto con los montantes delanteros.

El descapotable germano incorpora, asimismo, un tren de rodaje de configuración dinámica que reduce 15 milímetros su altura en comparación con la berlina. Algo que mejora su comportamiento y que ofrece una imagen más deportiva. Opcionalmente, este tren puede ir acompañado de la suspensión neumática Airmatic. También habrá disponible un tren de rodaje deportivo opcional.

El Clase C descapotable llegará a España con las mismas motorizaciones del C Coupé: las diésel C 220 d (170 CV) y C 250 d (204 CV); y las gasolina C 200 (184 CV), C 300 (245 CV), C 43 AMG 4Matic (367 CV), C 63 AMG (467 CV) y C 63 S AMG (510 CV). Todos ellos estarán disponibles con cambio automático 9G-Tronic, mientras que la tracción integral 4Matic es de serie en el C 43 y opcional en el C 200 y C 220 d. Su consumo oficial va de los 4,5 litros del C 220 d a los 9,3 del C 63 S AMG.

Prueba del Mercedes Clase C Cabrio

Durante los dos días de pruebas del Mercedes Clase C Cabrio he tenido la oportunidad de conducir las versiones C 250 d y C 300. Tras subirme al coche, lo primero que hago es accionar la capota. Un botón situado en la consola central activa el mecanismo eléctrico que tarda 20 segundos en destapar -o cubrir- el Clase C. Con el techo plegado, el maletero reduce su capacidad de 360 a 285 litros, algo que tendrás que tener en cuenta cada vez que viajes con equipaje. Otro control situado al lado sube el paravientos eléctrico opcional, Aircap, que sustituye al manual tradicional y que mitiga la acción del aire en el habitáculo tanto por la parte delantera como por la trasera. Finalmente, la ya conocida bufanda de aire, Airscarf, también está disponible en el primer Mercedes Clase C Cabrio.

Una vez en marcha, la acción del viento se deja notar en el habitáculo pero no resulta molesta. Su chasis destaca sobre todo por el confort de rodadura y el dinamismo que ofrece en cualquier tipo de carretera, incluso en zonas de curvas. Según tus preferencias, el control Dynamic Select te permite elegir hasta cinco modos de conducción (Confort, ECO, Sport, Sport Plus e Individual), que entre otros aspectos varía la entrega de potencia. Eso sí, en zonas especialmente reviradas, el motor diésel del C 250 d puede resultar algo perezoso en combinación con el cambio automático 9G-Tronic, ya que éste tiende a engranar la marcha más alta posible, algo que en ocasiones hace que el motor responda con un poco de retardo. Ahí es mejor hacer uso de las levas del volante para jugar tú mismo con el cambio. De todas formas, y en términos generales, me ha gustado más el comportamiento del bloque del C 300, un cuatro cilindros gasolina de 2,0 litros y 245 CV. No ostante, y como te comentaba anteriormente, ambos destacan por su calidad de rodadura. Lo que no me ha convencido es la consola central, demasiado elevada, que en giros cerrados molesta un poco porque el codo choca con ella.

Tras recorrer algunos puertos y carreteras estrechas, un invitado inoportuno hace acto de presencia: una tremenda tormenta nos obliga a capotar rápidamente el coche, aunque para hacerlo tenemos que reducir hasta 50 km/h (la velocidad máxima a la que funciona el sistema de plegado). La prueba del Mercedes Clase C Cabrio a cielo abierto ha terminado... Eso sí, es una buena oportunidad para probar su insonorización con el techo cerrado, que es buena, al igual que su estanqueidad.

Acabados de calidad

El habitáculo está a la altura de lo que nos tiene acostumbrado la marca: materiales de calidad y buenos acabados. Destacan sobre todo el cuero reflectante de la luz solar en cinco tonalidades (opcional), los asientos deportivos con apoyos laterales, los resposacabezas integrados y los aproximadores automáticos del cinturón de seguridad. Lo que menos me ha convencido ha sido su visibilidad: en ocasiones, el pilar A limita algo el campo de visión; algo similar ocurre con la pequeña luneta posterior. En la parte trasera, los dos asientos individuales pueden abatirse en relación 50:50 y ofrecen acceso al maletero. Eso sí, resultan algo estrechos y su altura al techo es bastante limitada (una persona que mida 1,76 toca la capota con la cabeza).

En el apartado tecnológico, el Clase C Cabrio cuenta con numerosos sistemas de seguridad y asistentes a la conducción, como la alerta por cansancio, Attention Assist, o la advertencia de colisión, Collision Prevention Assist Plus (ambos de serie). Opcionalmente están disponibles el Distronic Plus con servodirección inteligente, el freno Presafe con función de detención de peatones, el detector activo de cambio de carril o el aparcamiento semiautomatizado.

Llega después del verano

Las primeras unidades del Mercedes Clase C Cabrio 2016 llegarán a España en el mes de septiembre. Ofrecerá numerosas opciones de personalización (tapicerías, molduras, color exterior e interior del techo de lona, tono de la carrocería, etc.) y el exclusivo equipamiento AMG Line (paragolpes y faldones laterales específicos, parrilla de efecto diamante con pasadores cromados, molduras en aluminio mate, llantas AMG de 18 pulgadas, volante deportivo multifunción y pedales AMG, entre otros). Además, y como ya es habitual en la marca, coincidiendo con el lanzamiento del modelo se ofrecerá durante un tiempo limitado una variante Edition 1.

¿Su precio? Hasta finales de junio no se hará oficial, pero por lo que nos ha adelantado un responsable de la marca costará unos 6.000 euros más que la versión coupé (el precio de partida rondará los 48.000 euros).

¿Buscas un punto de vista diferente? Mira la prueba del Mercedes Clase C Cabrio de nuestros amigos de Top Gear.