Prueba Mash Five Hundred: una clásica de 400 ¡recién hecha!

"Cómo molaría comprar un coche clásico pero que estuviera recién fabricado, para disfrutar de su estética y prestaciones sin sufrir los horrores de todo aquello que se estropea con el paso del tiempo, ¿verdad?". Esta húmeda fantasía que tenemos los amantes de los vehículos históricos se truncó hace años en casi todos los turismos, debido a las estrictas normas de seguridad y emisiones que precipitaron el fin de modelos que llevaban décadas en el mercado. Sin embargo, en el mundo de las motos la historia es bien distinta, pues los fabricantes están respondiendo al interés del público por la moda neorretro y las monturas de capricho. Y hay una marca que, incluso, se ha planteado hacer esto a buen precio, con modelos nuevos -de serie o en ediciones limitadas-, fabricados en oriente, pero con corte clásico... y a un coste de lo más competitivo. Ejemplo: la prueba de esta Mash Five Hundred.

Es un buen caso para ilustrar esa necesidad que tienen muchos de hacerse con una 'clásica' estándar a estrenar. Cuando te subes a ella, ya llevas puesta en la cara una sonrisa de complicidad, porque la estética y el tacto son totalmente retro y el bloque de origen Honda petardea con la doble línea de escape como hacía tiempo que no escuchabas.

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Prueba Mash Five Hundred (15 imágenes)

Por eso le perdonas muchas cosas, como que en realidad sea una 'cuatrocientos' (397 cc, para ser exactos) -un desfase muy propio de antaño-, que el freno trasero sea de tambor, que la suspensión trasera tire a dura o que la información del cuadro sea muy básica y no incluya indicador del nivel de gasolina. Pero cuando los consumos mixtos no llegan a 4 litros a los 100 km, esto importa menos. 

Disfrutarás mucho de esta Mash y que, si vas a hacer escapadas interurbanas. La Five Hundred te enganchará como clásica recién salida del horno, por un precio razonable y con la fiabilidad de un bloque probadísimo. Estética y sensaciones a precio contenido. Eso es lo que pagarás en esta Mash. Prestaciones 'vintage' con las que quitarte el gusanillo -y los problemas de vejez- de cualquier moto antigua, a cambio de diversión... y de menos de 4 litros a los 100 km. 

Una prima, de visita

Cientos de kilómetros después, toca esperar a mi amigo David G. de Navarrete, que aparece con una motocicleta que me roba las miradas en los semáforos: la preciosa edición limitada de la Five Hundred que firma el preparador Von Dutch. Es la unidad 30 de las 200 producidas, y destaca por la placa que lleva sobre el faro con el número 500, los cubrerrelojes a juego con los puños, el guardabarros recortado, el manillar de bicicross, el asiento, la ausencia de portaequipajes, el amianto de los colectores y los neumáticos de campo. Ah, bueno, y una decoración propia en la que, como sucede en estas preparaciones, el nombre del autor destaca sobre el del fabricante, con unos remates de bastante calidad (algo no tan común). 

La Mash Five Hundred frente a la Mash Von Dutch 400 que probamos aquí. 

Con sus 27,7 CV, la Mash Five Hundred cumple en ciudad y es relativamente manejables para colarse entre el tráfico, con una buena respuesta desde abajo y una frenada suficiente (la horquilla delantera cabecea lo suyo), pero sin alardes -ni ABS-. Al salir a carretera camino de la sierra, la Mash de serie coge ventaja, puesto que la Mash Von Ducht paga demasiado caro sus zapatos de tacos, muy bonitos para el conjunto -y resolutivos para adentrarse puntualmente en el asfalto roto de las afueras o en un camino-, pero nada eficaces a partir de los 80 km/h.

De hecho, si te fijas, solo trae el retrovisor izquierdo (algo legal para no pasar de 100 km/h), por lo que, sin duda, esta moto está concebida para pasear los días de buen tiempo más que para un uso diario muy dinámico. Pero es tan bonita...

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Mash Von Dutch (15 imágenes)

Volviendo a la de serie, yo me quedaría antes con la Mash Five Hundred estándar, por comportamiento, por su relación calidad-precio y porque darte el capricho de tener una clásica sin los problemas 'de antes' no está nada mal. Tiene cosas que hoy en día están muy superadas, pero llamar la atención con una moto de capricho se paga, y aquí no es demasiado. ¿Te animas?

Ficha técnica

- Tipo de motor

Monocil. SOHC, inyec., 4v, 4 t, ref. aire

- Cilindrada/ Potencia

397 cc / 27,7 CV a 7.000 rpm

-Peso y número de marchas

151 kg y 5 velocidades

Depósito de combustible

13 litros

Neumáticos (del. y det.)

100/90-19 y 130/70-18

Suspensión (del. y det.)

Horquilla 35 mm y doble amortiguador

Frenos (del. y det.)

Disco de 280 mm y tambor de 160 mm

Precio (sin de costes matriculación) 

4.395 euros