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Prueba DS 4 Cross E-Tense: el nuevo (todo) camino al lujo

Prueba DS 4 Cross
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Estilo, glamour y buenas sensaciones.

No es necesario que salude con sus enormes luces diurnas de LED en cuanto te aproximas; ni que despliegue los tiradores escamoteables de las puertas; o que se iluminen esos pilotos traseros que parecen de un trabajado y caro cristal. 

El nuevo DS 4 gira muchos cuellos incluso antes de arrancar, porque rebosa diseño, elegancia, estilo, tecnología... y pretende marcar su propio (todo)camino hacia el mercado de los compactos premium, que se ha reinventado y ahora está cuajado vehículos de toda índole... pero con aires SUV.

Y ojo a esta nueva tendencia, porque ya hay varios modelos que están a medio camino (y nunca mejor dicho, otra vez) entre los otrora exitosísimos miembros del segmento C y la irrefrenable fiebre actual de los crossover. 

Así que, ante semejante demanda de los clientes y la feroz competencia ya existente, ¿qué puede aportar el nuevo modelo de la marca de lujo del grupo Stellantis?

Para empezar, unas formas en las que el equipo de Diseño no ha ahorrado en lápices, precisamente, porque todo es icónico, sofisticado, lleno de matices... y esta pintura Copper Goldaut que ves en nuestra unidad de pruebas es un auténtico escaparate de apéndices y matices. 

Para continuar, la versión Cross que protagoniza estas líneas tiene detalles ligeramente ¿camperos? de acabado, como la altura mínima al suelo o unas molduras sintéticas en el frontal que discurren por los laterales hacia un precioso y aerodinámico portón posterior. 

Seguidamente, otro caramelo es la etiqueta azul de Cero Emisiones que se consigue aquí gracias al apellido E-Tense y que es la opción híbrida enchufable (PHEV) alternativa a las otras dos posibilidades de motorización, gasolina PureTech y diésel BlueHDi

Pero aunque algunos coches entren por los ojos, de nada serviría una cara bonita con un precio de acceso nada barato (el nuevo DS 4 parte desde 29.300 euros y el E-Tense, de los 43.350) si el acceder al puesto de conducción no fuera otro festival para los sentidos

Formas más llamativas que intuitivas -desenvolverse con fluidez entre tanto botón físico y virtual requiere algún tiempo de adaptación, por no hablar de la pantalla táctil Smart Touch en la que dibujas algunas funciones-; asientos y volante calefactables (refrigeración también en lo primeros) de cuero con muchos reglajes, inserciones metálicas y de auténtica madera de ébano... 

Sólo se te aguará un poco semejante fiesta de bienvenida si detrás llevas a un adulto por poco patilargo que sea, puesto que el espacio disponible para las tres plazas posteriores no es lo mejor de este modelo.

Una vez acomodados y bien interconectados (varias tomas micro USB delante y detrás, otra de 12 V, carga por inducción para móviles y wifi) con todos los ADAS a punto (frenada automática de emergencia, cámara de visión nocturna con detección de peatones, control de crucero adaptativo...), toca comprobar de lo que es capaz este llamativo compacto.

Está provisto de una mecánica híbrida enchufable de 225 CV combinados, caja de cambios automática de 8 velocidades y sistema de amortiguación variable (de serie, en esta configuración). ¡Vamos a ello!Todo es suavidad, refinamiento y tecnología. 

Mis siempre adoradas levas permiten soltar menos el volante que en otros modelos de la competencia, así como disponer de un minúsculo selector en el túnel de transmisión en el que poner la Directa y olvidarse de toda complicación en modo Híbrido (se selecciona con otro botón junto a él).

También se puede aumentar aún más la comodidad en modo Confort; exprimir su potencia combinada con una mayor respuesta del motor y unos reglajes más duros en el modo Sport; o tirar sólo de batería en modo Eléctrico hasta 55 km... si es que te queda. 

De hecho, una vez que se agota, a pesar de los sistemas de regeneración energética y el freno motor con las mencionadas levas, el pedal izquierdo o el botón B, en realidad no es viable volver a recargarla y disponer de sus bondades (cero emisiones, conducción silenciosa, mayores picos de aceleración) salvo que lo enchufes directamente a la red. 

Lo bueno es que viene con un cargador de 7,4 kW que sería capaz de repostarlo totalmente en algo menos de dos horas.

Por lo demás, su comportamiento es muy agradable en todas las situaciones, aunque brilla más en ciudad y alrededores (donde es aún más rentable la electrificación) que en largos viajes o en aventuras fuera del asfalto. No es barato, pero el lujo, el diseño y la distinción se pagan. Y es cierto que hasta las versiones de acceso vienen con un equipamiento de serie completísimo.

Mi opinión

El nuevo DS 4 es un nuevo salto adelante en diseño, calidad, tecnología, confort y seguridad del que pocos pueden presumir en su segmento. Y puedes personalizarlo todo lo que tu bolsillo te lo permita. La versión Cross es pintona, aunque más estética que campera.

Valoración

Nota8

En la prueba del DS 4 Cross intentamos descifrar si será este elegante crossover híbrido-enchufable algo más que un compacto con aires de seductor todocamino.

Lo mejor

El nuevo lenguaje de diseño de DS se afianza en este precioso y sofisticado compacto con toques de crossover.

Lo peor

Este PHEV es versátil y luce más que en otros modelos más grandes y pesados de Stellantis. La batería depende demasiado del enchufe.

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