BMW 635 CSi: un 'youngtimer' atemporal

Los ojos de un tipo maduro brillan más que nunca mientras exclama: "¿Es tuyo? ¡Era el coche de mis sueños!", para después subirse a su Corolla y dirigirse al exterior por la rampa del parking. Esta es una escena muy repetida para cualquier poseedor de un BMW 6. ¿Qué tendrá este modelo que levanta pasiones independientemente de la época en que se encuentre? ¿Qué lo hace tan atemporal?

Su predecesor, el CS, fue un modelo dirigido a tipos con nervio, a la par que elegantes. El mismo pliego de condiciones se aplicó al desarrollo de éste: el por entonces jefe de diseño Paul Bracq planteó un coupé deportivo con una línea sin estridencias y un aspecto que no pasara de moda. Los ejecutivos de Baviera lo querían así, porque la marca se había ganado cierto descrédito por culpa de algunas versiones del anterior CS un poco salidas de tono. El modelo CSL con su enorme alerón trasero, por ejemplo, fue denominado jocosamente por muchos "Batmóvil". Y el brutal 2002 Turbo fue una versión poco acertada en plena crisis del petróleo, tanto, que incluso generó un debate en el Bundestag (parlamento alemán).

De manera que cuando se presentó en el Salón de Ginebra allá por 1976, llamó muy poco la atención, con sus pequeños dobles faros delanteros, su parrilla cromada y su delgado pilar C. Incluso un Mercedes SLC de la época resultaba más atrevido.

Algo más tarde adoptó un spoiler delantero y un alerón trasero de goma, pero ni siquiera esto lo despojó de su elegancia, casi fría. Los clientes parecieron entender el concepto a la perfección, y por eso eligieron colores acordes con el modelo. Si buscas uno, olvídate de los tonos llamativos: gris mate, gris grafito y gris plata serán tus opciones. Y si se trata de las primeras 10.000 unidades, producidas por Karmann, también existía la opción marrón tostado. Cuando BMW se hizo más tarde cargo de la producción, aumentó la calidad varios enteros. Pero el verdadero colorido de este modelo estaba en lo que ofrecía al conductor:  asientos con buen agarre y motores de seis cilindros en línea poderosos y con un sonido cautivador. Ni en tráfico urbano, ni volando sobre el carril derecho de una autovía, cede antes de las 6.000 vueltas. Y no tiene problemas en mantener velocidades de crucero de 200 km/h (en Alemania, que es legal, claro está) durante kilómetros y kilómetros.

¿Y lo mejor de todo? No tiene que tocarte la lotería para hacerte con uno, su precio aún está con los pies en la tierra.

Historia del BMW 635 CSi

1976: debut en el Salón de Ginebra. Había dos modelos, 630 CS (184 CV) y 633 CSI (200 CV). Precio: desde 36.000 euros. 1978: nuevo tope de gama: 635 CSi (218 CV). 1979: 628 CSi sustituye al 630 CS. 1982: 633 CSi se retira. 1983: M 635 CSi con el motor del M1: 286 CV, 250 km/h, 55.000 euros. 1985: catalizador bajo pedido, airbag. 1987: ABS de serie. 1989: en abril cesa la producción tras 86.113 ejemplares fabricados. Ningún otro modelo de serie de BMW ha durado tanto sin sufrir prácticamente modificaciones.

Más/Menos

Este seis cilindros, además de un motor de ensueño, es un motor sólido. La carrocería tiende a la corrosión. Las aletas, la chapa que rodea el vano motor, elementos de la suspensión, la parte interior de los pasos de rueda, los vanos de las puertas y los márgenes del techo deslizable son sus típicos puntos débiles. Por otro lado, muchos BMW coupé clásicos han sido víctimas de los amantes de las modificaciones. Muchos ejemplares, incluso bien cuidados, dan problemas con la electrónica de abordo y los elevalunas eléctricos. El catalizador sólo se podía montar a partir de 1985, y bajo pedido.

Recambios

No necesita un mecánico expertísimo: cualquier taller de BMW te lo puede reparar todavía a día de hoy. Y los recambios tienen un precio moderado: una bomba de agua cuesta unos 125 euros (modelo 1983-89), una bomba de gasolina está en torno a los 200, los discos de freno, unos 73, los aditamentos estéticos entre 58 y 75 por unidad. Bastante accesible, a no ser que se te rompa todo al mismo tiempo.

Mercado

La búsqueda de un ejemplar en perfecto estado debería requerir 15.000 euros como mucho. Pero incluso si tienes 6.000 euros en el bolsillo, podrás hacerte con uno sin demasiados kilómetros y en unas condiciones aceptables. Los más difíciles de encontrar son los modelos 630 CS (5.766 unidades), 628 CSi (5.951) y el muy buscado M 635 i (5.855) Respecto al mayoritario 635 CSi (45.215unidades), que no te extrañe encontrarte muchos de ellos ensanchados y modificados. Además, son asequibles, y muchos han podido ser mal cuidados.

Consejos

Para puristas: un 6 de los primeros, sin spoiler y con la etiqueta de clásico. Para los de uso diario: un 635 CSi de los últimos con catalizador y climatizador (10-12.000 euros). Para gourmets:  un M 635 CSi de los caros (sobre 20.000), pero con potencial para revalorizarse. Para todos: huye de los que tengan un mantenimiento dudoso.

Direcciones

Internet

www.bmwfaq.es
www.bigcoupe.com
www.e-24.ru/eng
www.bmwworld.com

Libros

BMW 6 Series Enthusiast's Companion, Bentley Publishers
BMW 6 Series Ultimate Portfolio, R.M. Clarke, Brookland Books

Fotos: A. Lindlahr, fabricante.