¿Qué significan las alas negras en el logotipo de Bentley?

Bentley es una marca con más de un siglo de historia. Es tiempo suficiente como para hacer de todo, pero siempre hay hueco para introducir novedades inéditas, como la primera aparición de las alas negras en el logotipo de Bentley, que sirven de identificativo para el nuevo acabado Black Edition.

Por el momento la firma británica solo lo ha aplicado al Bentley Bentayga, que saca su lado más oscuro.

Está disponible en siete colores de carrocería (Mandarin, Signal Yellow, Klein Blue, Pillar Box Red, Ice, Hyper Green y Beluga), sobre los que destaca el color negro empleado en múltiples detalles exteriores.

Se aprecia una raya láser en el kit de carrocería Styling Specification presente bajo el paragolpes delantero, los estribos laterales y sobre el alerón trasero; las llantas de 22 pulgadas están acabadas en negro y tras ellas las pinzas de freno presentan un tono negro brillante.

Además, todos los elementos que tradicionalmente son metálicos en el modelo, como los logos, insignias, marcos de las ventanillas, etc., son reemplazados por metal negro brillante en esta variante.

El interior también presenta un exclusivo diseño cromático, que combina la piel Beluga con pinceladas de colores de contraste brillantes presentes en las costuras, los ribetes y ciertas secciones de la tapicería de cuero, destacando la presencia de emblema bordado en cada asiento.

Además, se aplica un trenzado de fibra de carbono en el salpicadero, la consola central y las molduras de la zona de la cadera. Esto se complementa con el pack Dark Chrome, en el que el negro brillante da forma a elementos como las salidas de aire o las rejillas de ventilación centrales.

A nivel mecánico el Bentley Bentayga S Black Edition monta el motor 4.0 V8 turboalimentado que desarrolla 550 CV de potencia y 770 Nm de par máximo para acelerar de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 290 km/h. No hay datos de su consumo, pero sí que sus emisiones de CO2 son de 296 g/km y que su autonomía es de 654 km.

Por encima está el Bentayga S Hybrid Black Edition, con un sistema de propulsión electrificado que desarrolla 462 CV al combinar un motor de gasolina 3.0 V6 TFSI y el bloque eléctrico de 100 kW. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,3 segundos y de marcar una velocidad máxima de 254 km/h.

A nivel dinámico ambos disfrutan de la dirección electrónica a las cuatro ruedas, que se puede combinar con el Bentley Dynamic Ride, que puede realizar hasta +/- 4,8° de bloqueo de la dirección en las ruedas traseras, mejorando la maniobrabilidad cuando se circula a bajas velocidades y la estabilidad cuando se va rápido.

Además, el modo Sport mejora el tacto de la dirección, aumenta la respuesta en los giros y permite reducir todavía más el balanceo de la carrocería gracias al 15% extra que aportan la amortiguación de la suspensión neumática y el ajuste exclusivo que s produce tanto en el ESC (Electronic Stability Control) como en el mencionado ‘Bentley Dynamic Ride’.