Nico Rosberg, Campeón del Mundo de F1 de 2016, no podrá acceder al paddock de la Fórmula 1 de forma indefinida al no haberse vacunado contra el COVID-19. El expiloto, que ahora trabaja como comentarista de la televisión Sky Sports, ha superado el virus y asegura que tiene anticuerpos, pero para la F1 eso ya no es suficiente. 

Curiosamente, durante el Gran Premio de Mónaco, Rosberg analizó lo que sucedía en la carrera desde su apartamento en el Principado y no desde la pista, como hubiera sido lo normal. Ahora, unos días después, se ha conocido la verdad: el alemán, campeón de F1 con Mercedes hace seis años, no tiene permiso para acceder al paddock.

Nico no se ha vacunado contra el COVID-19, de acuerdo con la información que publica la web alemana Sport1. Durante el año pasado, el acceso al paddock era posible sin haber recibido las dosis contra el COVID-19, pero desde 2022 la vacunación es obligatoria y, además, ésta debe ser debidamente acreditada siguiendo las reglas del país de origen. 

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La única exención posible es debido a motivos médicos que impidan la vacunación. Rosberg ha intentado pedir este permiso especial, pero la Fórmula 1 también se lo ha rechazado. Por este motivo, cuando trató de acceder al paddock del GP de Mónaco haciendo uso de su acreditación permanente como campeón del mundo, los comisarios le impidieron entrar.

"He superado la enfermedad del coronavirus y por ello tengo unos anticuerpos monstruosos dentro de mí. Me hago pruebas regularmente. De acuerdo con esta circunstancia, mi médico me advirtió que la vacunación no tendría ningún sentido", publica Sport1.

Así las cosas, para poder mantener la colaboración con la televisión Sky Sports, Rosberg tendrá que continuar participando en las retransmisiones de forma remota, al menos mientra la F1 mantenga estas reglas y siempre que no quiera vacunarse. 

La última carrera de F1 en la que se ha visto a Nico Rosberg es el GP de Abu Dhabi de 2021, donde finalizó la pasada temporada, en la que como decíamos, era suficiente con dar negativo en las pruebas de COVID-19 que se hacían durante los fines de semana.