¿Le puedes exigir a un taxi o VTC que te ponga el aire acondicionado?

Estamos atravesando la segunda ola de calor del verano 2023, con temperaturas que se acercan a los 45 grados en algunos puntos del valle del Guadalquivir y de 40 grados en zonas del centro-sur peninsular. Esto dificulta salir a la calle y realizar desplazamientos cotidianos en medios de transporte. En este sentido, surge una pregunta: ¿se puede exigir a un taxi o VTC poner el aire acondicionado?

Huelga decir que tener el habitáculo de un coche a una temperatura óptica de confort es vital para conducir con seguridad. Hay que recordar que, según la DGT, a partir de 35 grados, equivale a una tasa de alcohol de 0,5 mg.

Por tanto, el aire acondicionado en verano y la calefacción en invierno son importante, tanto para los pasajeros como para el conductor del taxi o VTC. Pero, volviendo a la pregunta inicial: ¿se puede exigir que lo ponga? 

Para responder a esta pregunta, primero hay que mirar qué dice la legislación. El año pasado se aprobó el Real Decreto-ley 14/2022, de 1 de agosto, de medidas de sostenibilidad económica en el ámbito del transporte y medidas de ahorro, eficiencia energética y de reducción de la dependencia energética del gas natural.

Este decreto establecía que la temperatura máxima en un recinto cerrado no debía ser inferior a 27 grados. Sin embargo, los medios de transportes quedaron fuera de esta medida, ya que se rigen por su propia normativa específica. 

¿Le puedes exigir a un taxi o VTC que te ponga el aire acondicionado?

En lo que respecta al taxi, el colectivo está regulado por la normativa de cada ayuntamiento, aunque siempre sujeta a la Ley 5/2018, de 19 de abril, del taxi, según la cual los usuarios pueden "determinar las condiciones de confort en el habitáculo y, a tal efecto, requerir al conductor el encendido o apagado de la calefacción y del aire acondicionado si el vehículo dispone de este". 

Por ejemplo, en Madrid, los vehículos de taxi están obligados a equipar un sistema de aire acondicionado y el taxista debe "respetar la elección del usuario sobre el uso del aire acondicionado o climatización siempre que la temperatura solicitada no sea inferior a 21 grados ni superior a 26, salvo que conductor y usuario estén de acuerdo en otra inferior o superior", tal y como señala Legálitas.

En Sevilla, la ordenanza municipal permite al pasajero “disponer sobre el funcionamiento del aire acondicionado, climatización o calefacción del vehículo, pudiendo incluso abandonar el servicio, sin coste para el usuario, si al requerir la puesta en marcha de dichos sistemas, estos no funcionan". 

En cuanto a las VTC, la normativa autonómica no establece competencias específicas a los ayuntamientos, pero sí la competencia general para la ordenación, gestión, inspección y sanción de los servicios de transporte que se realicen dentro de su ámbito municipal.

Parecido en los VTC

Por lo general, los VTC tienen un funcionamiento parecido a los taxis en cuanto al uso del aire acondicionado. Así, el conductor está obligado a "respetar la elección de la persona usuaria sobre el uso del aire acondicionado o climatización, siempre que la temperatura solicitada no sea inferior a 18 ni superior a 26 grados, salvo que quien conduzca y la persona usuaria estén de acuerdo en otra inferior o superior".

Además, en el caso de Madrid, los usuarios tienen derecho a “requerir la apertura o cierre de las ventanillas traseras y delanteras, así como de los sistemas de climatización de los que esté provisto el vehículo, pudiendo incluso bajar del vehículo, sin coste para la persona usuaria, si al requerir la puesta en marcha del sistema de aire acondicionado o de climatización, al inicio del servicio, éste no funcionara”.

Por último, los taxis y conductores de VTC están obligados a incluir hojas de reclamaciones para que los clientes puedan manifestar sus quejas, así como a responderlas con la mayor brevedad posible.