Logo Autobild.es

March 881, la historia de la primera genialidad de Adrian Newey en la F1

March 881

Esta es la historia del primer Fórmula 1 diseñado por Adrian Newey. Aunque no ganó carreras estuvo cerca de hacerlo, y su concepto le abrió las puertas de Williams.

Casi todas las historias de éxito en la Fórmula 1 tienen un inicio modesto, un comienzo alejado de los grandes focos pero marcado por impresionantes destellos de calidad. Quien piensa en Adrian Newey piensa en el diseñador de F1 más exitoso de todos los tiempos; pero también para él hubo una primera oportunidad, un primer diseño: se llamaba March 881. Y hablamos del año 1988.

Adrian Newey tenía claro desde muy pequeño que quería trabajar en las carreras de coches. Por este motivo, después de estudiar Aeronáutica y Astronáutica en la Universidad de Southampton, y graduarse con honores, buscó la forma de comenzar a trabajar en el mundo del motor. En Reino Unido esto era más sencillo que en otras partes, dados los numerosos equipos que tienen su sede allí.

Su primer trabajo fue en el equipo Fittipaldi de Fórmula 1, bajo las órdenes de Harvey Postlethwaite, como ingeniero de aerodinámica junior. Su entrevista de trabajo fue de lo más peculiar, ya que Postlethwaite le llamó para conocerle y acabó dando una vuelta con su Ducati. Tras hacerlo (y disfrutarlo), le informó de que estaba dentro del equipo.

Solo un año después de su debut en Fittipaldi, donde pudo celebrar dos podios de Emerson Fittipaldi y Keke Rosberg, Newey se unió a March, primero para trabajar como ingeniero del venezolano Johnny Cecotto en la Fórmula 2... y después para diseñar los coches que competirían en el IMSA, el Campeonato de Prototipos y GT más importante de Estados Unidos.

El coche creado por Newey, el March 82G y sus evoluciones, fueron un auténtico éxito, llegando a conquistar el título de la categoría GTP durante dos años seguidos. De la mano de March, Newey también diseñó los 85C y 86C de la CART (actual Indycar) en 1985 y 1986, años en los que llevó al fabricante a ganar dos títulos de la categoría y las 500 Millas de Indianápolis del 85 con Danny Sullivan.

Adrian Newey se va de Red Bull: fecha y su posible destino

Regreso y nacimiento del March 881, el primer F1 de Newey

Después de un breve periodo como ingeniero de Mario Andretti en la CART, Adrian Newey regresó a la Fórmula 1 en 1988, de nuevo junto a March, y esta vez como jefe de ingeniería del equipo ahora conocido como Leyton House March Racing. Por primera vez, el británico tenía el control general del concepto del monoplaza en la F1, y la confianza depositada en él dio su resultado.

A pesar de contar con un presupuesto limitado en comparación con los equipos de primera fila, Newey consiguió diseñar un coche donde la aerodinámica compensaba otras posibles debilidades, como su motor atmosférico Judd V8 frente a los turbo que imperaban en la época. El March 881 llegó a ser el único coche con motor atmosférico en liderar una carrera aquel año.

"Como los coches turbo tenían más potencia, nuestra filosofía consistió en centrarnos en la aerodinámica como elemento clave en el diseño, y posteriormente encajar el apartado mecánico. En aquel tiempo, los coches se diseñaban en base a la mecánica y los ingenieros de aerodinámica se adaptaban a ello", recordó Newey más tarde.

Equipo Leyton House March Newey

El monoplaza contaba con innovaciones aerodinámicas tales como un morro elevado, endplates delanteros y traseros, o un avanzado difusor. Para Newey, fue un coche que "cambió la dirección en el diseño de la F1. Marcó tendencia. Era más eficiente aerodinámicamente que cualquier otra cosa".

El March 881 contó con los pilotos Mauricio Gugelmin e Ivan Capelli durante la temporada 1988, y logró estar en los puntos regularmente. Capelli consiguió dos podios en los Grandes Premios de Bélgica y Portugal (donde acabó segundo tras Prost y llegó a liderar), y Gugelmin sumó un cuarto y un quinto puesto. En total, consiguieron 22 puntos para terminar sextos en el Mundial de Constructores.

Para Newey, si este coche hubiera competido para el equipo Williams - con sus posibilidades técnicas, presupuesto y personal -  y Nigel Mansell hubiera sido uno de sus pilotos, habría ganado carreras.

Pedro de la Rosa con el McLaren MP4-18

El 881 también fue utilizado en las dos primeras carreras de 1989, donde Gugelmin consiguió subir al podio en el GP de Brasil, su carrera de casa. Justo después, el monoplaza fue reemplazado por su sustituto, el CG891, cuyos resultados estuvieron lejos de lo esperado: no sumó ni un solo punto en 1989. 

Si bien era una evolución del 881, el motor más compacto de Judd y los cambios realizados en el monoplaza no funcionaron correctamente, a pesar de que los resultados del túnel del viento habían sido positivos. 

Ivan Capelli, segundo tras el McLaren de Alain Prost en el GP de Portugal de 1988
Ivan Capelli, segundo tras el McLaren de Alain Prost en el GP de Portugal de 1988

Más adelante, en 2016, Newey explicaría que el March 881 fue el coche más importante de su carrera deportiva, ya que "aunque no ganó ninguna carrera, fue construido de una forma muy modesta y en aquel tiempo era necesario un motor turbo para ganar. Teníamos menos potencia, así que hice un coche muy aerodinámico. Lideró una carrera, subió al podio y catapultó mi carrera hacia mejores opciones".

A mitad de la temporada 1990, para la cual Leyton House compró March y pasó de ser patrocinador del equipo a propietario, Newey fue despedido, probablemente por razones económicas. Para aquel entonces el equipo casi había ganado el GP de Francia, donde Ivan Capelli finalizó segundo a solo ocho segundos de Alain Prost.

Los diseños de Newey en March no pasaron desapercibidos, especialmente el 881. Maravillado por su concepto, Patrick Head, entonces director técnico del equipo Williams, impulsó el fichaje del británico por la escudería de Sir Frank. En Grove comenzó la historia de éxito en la F1 que dura hasta la actualidad, comenzando con el dominio del FW14B con Nigel Mansell al volante.

Conoce cómo trabajamos en Autobild.