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El Lamborghini Aventador S pasa por los talleres de Mansory

Lamborghini Aventador S
Mansory se ha puesto manos a la obra con el Lamborghini Aventador S dando como resultado una preparación que sorprendentemente puede tildarse de discreta. Siempre y cuando podamos considerar como tal y un vehículo nacido en Sant'Agata.

Cuando un Lamborghini entra en el taller de un preparador nos podemos esperar cualquier cosa. Ya sabemos que el mundo del 'tuning' tiende a radicalizar todo lo que toca, algo nada sencillo cuando se trata de uno de los modelos italianos. Sin embargo, los cambios que propone Mansory para el Lamborghini Aventador S que protagoniza este artículo son sorprendentemente discretos.

El preparador de origen alemán ha optado por añadir una serie de nuevos componentes a la carrocería del Aventador S fabricados en fibra de carbono. Entre ellos se encuentran un nuevo capó, nuevas tomas de aire tanto en el frontal como en los laterales, los bajos de los laterales, un alerón trasero, el difusor de aire y una nueva tapa motor. Mansory asegura que todas estas piezas tienen hasta 15 diferentes composiciones, además de diferentes colores que, vistos desde cerca, son realmente llamativos.

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Como en toda preparación de tronío que se presenta, la de Mansory con este Lamborghini Aventador S incluye también unas nuevas llantas. En este caso se trata de unas Carbonado-V de siete radios cuyo tamaño es de 20 pulgadas en el tren delantero y 21 en el trasero. Éstas son las encargadas de alojar unos neumáticos Pirelli P Zero de 255/30 y 355/25.

Si nos fijamos en el habitáculo también encontramos algunas modificaciones en las que la fibra de carbono vuelve a ser protagonista. Se aprecian cambios de esta forma en el volante, en el panel de instrumentación, además de una tapicería más exclusiva que aporta el toque elegante.

Donde no hay modificación alguna, ni falta que hace, es en el motor que ofrece este Lamborghini Aventador S. Se trata de un V12 de 6,5 litros que desarrolla la friolera de 740 CV y un par máximo de 690 Nm. Cifras suficientes para completar el sprint de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y alcanzar una velocidad punta de 350 km/h.

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