Elon Musk volvió a asistir a un Gran Premio de Fórmula 1 este fin de semana en Estados Unidos. Es la segunda vez que vemos al polémico empresario en una prueba de la categoría reina este año, y como te podrás imaginar, su aparición en el paddock del Circuito de Austin no fue nada discreta. 

De hecho, Musk se llevó al trazado situado en Texas el Tesla Cybertruck, el espectacular y todopoderoso pick-up de la firma americana, del que se espera que el próximo mes se entreguen sus primeras unidades de producción. Este proceso se ha retrasado más de lo esperado, tras haber sido presentado en 2019 a bombo y platillo.

Elon Musk admite que cavaron su “propia tumba con el Tesla Cybertruck”

Con un diseño innovador, enfocado al mercado americano y considerado prácticamente irrompible (a prueba de balas, entre otras características), el Cybertruck habría supuesto un gran dolor de cabeza para la marca, debido a su monstruoso diseño de líneas rectas que presume de ser indestructible (en teoría) y a la avanzada tecnología que incorpora. 

Según se desveló en un email que ha salido a la luz, Musk explicaba que "todas las piezas del vehículo, internas o por parte de proveedores, han de ser diseñadas y fabricadas con una precisión inferior a 10 micras". 

Esto no solo sería un reto a nivel de producción, sino también a nivel financiero, dada la complejidad del proceso, cuando la idea inicial era que el precio del modelo fuera de alrededor de 40.000 dólares.

Quizás para celebrar el próximo inicio de las entregas del Cybertruck, Elon Musk decidió acudir al Gran Premio de Estados Unidos de este fin de semana, en el Circuito de Austin, con uno de estos esperados vehículos. Como él mismo habría pensado, su llegada al trazado situado en Texas no pasó desapercibida y dio mucho que hablar.

Musk asistió al evento junto con su hijo, X Æ A-12, de tres años, y volvió a ser visto en boxes. En su anterior visita a la Fórmula 1, en el Gran Premio de Miami de hace unos meses, el máximo responsable de X, SpaceX o Tesla, lanzó la propuesta de crear una categoría en la que compitieran monoplazas de distinta tecnología, donde hubiera carreras entre monoplazas híbridos y eléctricos.