Cruce de 'rajadas' entre Kevin Schwantz y Andrea Iannone en plena crisis de Suzuki

Cruce de 'rajadas' entre Kevin Schwantz y Andrea Iannone en plena crisis de Suzuki. La situación del piloto italiano está empezando a desesperar al que probablemente sea el mejor embajador de la fábrica japonesa en el Mundial de Motociclismo, ya que con el estadounidense lograron su última corona en la categoría reina en el año 1993 con la mítica RGV 500.

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Schwantz estuvo este fin de semana en el GP de Alemania invitado por Suzuki y pudo comprobar por sí mismo la desesperación que siente Iannone por la GSX-RR. El norteamericano concedió una entrevista a La Gazzetta Dello Sport y explicó que la mayor parte de la culpa no la tiene Suzuki, sino el piloto italiano.

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“No estoy tan cerca de ellos, pero por mi experiencia sé que si algo va mal, sólo hay un modo de arreglarlo, trabajando. Hay que probar, probar y probar, hacer más que tus rivales. No me creo que la moto sea tan inferior a las demás, pienso que es Iannone el que está perdido, porque quiere que la Suzuki se comporte como una Ducati, pero esta moto nunca será una Ducati”, explica Schwantz.

Las palabras más duras del americano al piloto de Vasto vienen cuando le preguntan por las declaraciones que realizó Iannone de que no iba a arriesgar con una moto que no le transmite ninguna confianza: “Pues que se dedique a los karts. Tiene un trabajo con el que sueñan miles de personas en un equipo oficial, con docenas de ingenieros trabajando para ti. Para mí es una situación triste, porque todo el mundo sabe que no es una moto para finalizar el 20”, en alusión a los resultados obtenidos por Iannone en los libres de Sachsenring del pasado viernes.

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Para Kevin Schwantz la esperanza de Suzuki es que Álex Rins tras el parón veraniego recupere la confianza y poco a poco demuestre el potencial de la GSX-RR. Schwantz tiene muchas esperanzas puestas sobre el barcelonés: “Espero que Rins recupere la confianza con la moto y que tras el parón se parezca a lo que fue Maverick en sus inicios con la Suzuki. Quiero ver cuál es su potencial, pero alguien debería decirle a Iannone que haga su trabajo”.

La reacción por de Iannone no se ha hecho esperar y el piloto de Vasto ha señalado que “son una pena” las palabras de Kevin Schwantz criticando su profesionalidad. El italiano esperaba tener una relación “padre-hijo” con la leyenda de MotoGP y también que “me hubiese dicho esas palabras a la cara”. En cuanto a la afirmación sobre que se dedique a los karts, Iannone ha colgado una foto en su cuenta de Instagram anunciando que iba a pasar el día montado en su kart. Un auténtico diálogo de besugos donde la que más pierde es Suzuki.